Cuando
te sientas mal, no abandones la esperanza, la esperanza te dará fuerzas para
seguir adelante.
Cuando
sientas que ya nada te importa, nunca dejes de creer en
Dios.
Mientra
creas que puedas lograrlo, tendrás un motivo para
intentarlo.
No dejes
que nadie retenga tu felicidad en sus manos, sujétala entre las tuyas, para que
siempre esté cerca de tí.
No
esperes que lo que desees venga a tí, buscalo con todas tus fuerzas, sabiendo
que la vida te encontrará en la mitad del camino.
No
sientas que has perdido cuando tus planes y sueños no alcancen a cumplir tus
anhelos.
Cada vez
que aprendes algo nuevo, sobre tí, sobre la vida, has avanzado. No hagas nada
que disminuya tu respeto.
El estar
satisfecho con uno mismo es esencial para estar satisfecho
con la
vida.
(
Palabras para el alma )