Amar la gracia delicada del cisne azul y de la rosa rosa; amar la luz del alba y la de las estrellas que se abren y la de las sonrisas que se alargan Amar la plenitud del árbol, amar la música del agua y la dulzura de la fruta y la dulzura de las almas dulces. Amar lo amable, no es amor:
Amor es ponerse de almohada para el cansancio de cada día; es ponerse de sol vivo en el ansia de la semilla ciega que perdió el rumbo de la luz, aprisionada por su tierra, vencida por su misma tierra
Amor es desenredar marañas de caminos en la tiniebla: ¡Amor es ser camino y ser escala! Amor es este amar lo que nos duele, lo que nos sangra por dentro.
Es entrarse en la entraña de la noche y adivinarle la estrella en germen ¡La esperanza de la estrella!
Amor es amar desde la raíz negra. Amor es perdonar; y lo que es más que perdonar, es comprender Amor es apretarse a la cruz, y clavarse a la cruz, y morir y resucitar