No tengas miedo de estar solo,
de mirarte interiormente
y de encontrarte en tu silencio.
Ten miedo, de ser un solitario,
aislado de tus hermanos, desconfiado, sin amigos
y sin comunicación.
Nunca temas decir la verdad,
o expresar con claridad
lo que sientes y afirmar aquello que has visto o has oído.
Teme más bien, engañarte a ti mismo,
auto convencerte de la mentira o colocar máscaras en tu rostro.
Sé tu mismo en donde estés,
aceptando a los otros como son.
Vive con intensidad y dinamismo.
Rompe tus murallas y levántate;