|
De: cele19331 (Mensaje original) |
Enviado: 16/07/2010 12:04 |
Ángel Gabilondo
Va por ti, va por vosotros
Los afectos se cuelan en las grietas que la vida deja abiertas, sellando cada instante compartido con recuerdos que nunca mueren, con pensamientos al aire.
No es tan fácil describir aquello que nos mueve. Podría resumirse mal diciendo que es el instinto de vivir, pero es tan verdadero como insuficiente. A veces me sorprendo lleno de pasión y de ganas, con ánimo y con fuerza, dispuesto. Y en alguna medida lo encuentro inexplicable. Es como si uno estuviera por encima de su propio vivir y no hubiera modo de entenderlo. Miro dentro de mí, me detengo en lo que soy, en lo que me sucede y, en última instancia, lo razonable sería ir tirando. A fin de cuentas, no es para tanto. Más bien lo sensato parecería encontrarse algo desalentado y, por supuesto, desenvolverse con mediocridad y sin aspavientos. Quizás es precisamente eso lo que hacemos. Pero ni siquiera una vez expuestas todas las razones, y analizadas todas las causas, se acaba de entender por qué en ocasiones estamos tan bien o tan mal. Claro que, si nos fijamos, encontramos numerosas explicaciones, aunque no serían suficientes para los demás, ni siquiera, en otros momentos, para nosotros mismos. Sin duda influye esa capacidad de sobreponerse a la propia situación, el coraje, la decisión, la valentía, la fuerza. En definitiva, la entereza y, aún más, una integridad que no es sólo física. Ojalá las tuviéramos. Démosle vuelta y vueltas y, tal vez analizado todo del todo, no quede explicado en absoluto. Y hasta tal punto, que considero que, para comprender algo, he de mirar en otra dirección. Consideremos la posibilidad de que, salvo necesidades absolutamente decisivas, que no son tantas, y, al margen de ellas, lo que nos ocurre tenga mucho que ver con los afectos. Si estamos efectivamente bien, lo demás resulta muy llevadero, e incluso puede que agradable. Esta sencilla declaración merece ser recordada de vez en cuando. Así visto, comprendo que no siendo mi vida para tanto me encuentre en ocasiones tan dichoso. Es por ti, es por vosotros. No es que todo se resuelva porque existas, porque existáis, es que resulta más apacible convivir con algunos problemas y cierta desazón si estás cerca, a mi lado. El aliento no surge, sin más, del interior, nos viene del otro, de quien nos quiere, acompaña y desafía. Hasta tal punto que acaba siendo no ya sólo un estímulo, sino una razón para proseguir. No es sólo contigo. Ahora es ya por ti. Y va por vosotros.
Cele -Celestino- | | |
|
|
Primer
Anterior
2 a 4 de 4
Siguiente
Último
|
|
El aliento no surge, sin más, del interior, nos viene del otro, de quien nos quiere, acompaña y desafía. Hasta tal punto que acaba siendo no ya sólo un estímulo, sino una razón para proseguir. No es sólo contigo. Ahora es ya por ti. Y va por vosotros.
Gracias cele por este excelente mensaje
Con tu permiso me lo voy a quedar y lo imprimo
Gracias
Lola![](http://www.imagehotel.net/images/k37mvoqsgq.gif) |
|
|
|
Gracias celestino muy bueno....
El aliento no surge, sin más, del interior, nos viene del otro, de quien nos quiere, acompaña y desafía. Hasta tal punto que acaba siendo no ya sólo un estímulo, sino una razón para proseguir. No es sólo contigo. Ahora es ya por ti. Y va por vosotros.
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 4 de 4
Siguiente
Último
|