TU VOZ
CUANDO escucho tu
voz amanecida
entre begonias y palmeras
siento crecer el tiempo agigantado,
oigo crecer el arpa y las voces
multiplicadas en suaves espirales,
en brumas, en montañas,
en latido inaugural,
en sangre nueva.
Suenas como el mar, como el arroyo,
como el trueno que arrasa la montaña
y es lluvia bienhechora tu palabra
sobre la angustia que
traspasa al hombre.
Vienes desde los tiempos evangélicos,
de la lejanía, del origen.
Vienes desde el fondo de los mundos
con tu voz, con tu paz, con tu mirada
En tu voz, en tu rostro, en tu palabra
Dios quiso revelar al mundo triste
la esencia del misterio,
la Verdad, el Camino, la Vida,
la iluminada eternidad sin pausa.
Autora: Malisa Moretti Canedo