Que tu paz florezca en la tierra.
Que nadie sea rechazado como tú lo fuiste.
Que nadie se sienta forastero como tú te sentiste.
Que todos encuentren un trabajo digno, como tú tuviste en Nazaret.
Que las familia no se rompan por causa de migración, sino que permanezcan unidas como la tuya.
Que sepamos respetar, valorar e integrar a cuantos viven entre nosotros, como prolongación de tu presencia.