SON MOMENTOS DIFÍCILES
Todos nosotros hemos pasado muchos días, o semanas
enteras, sin recibir ningún gesto de cariño del prójimo.
Son momentos difíciles, cuando el calor
humano desaparece, y la vida se reduce a un arduo esfuerzo por
sobrevivir.
En esos momentos en que el fuego ajeno no le da calor a
nuestra alma, debemos revisar nuestro propio hogar. Debemos agregarle más leña y
tratar de iluminar la sala oscura en la que nuestra vida se
transformó.
Cuando escuchemos que nuestro fuego crepita, que la madera
cruje, que las brasas brillan o las historias que las llamas cuentan, la
esperanza nos será devuelta.
Si somos capaces de amar, también seremos capaces de ser
amados. No es más que cuestión de tiempo...
Autor: Paulo Coelho