Romance de
ayer!
Una noche una pareja de viejos estaba ya acostada en su cama. El
marido se estaba quedando dormido, pero su mujer se sentía romántica y quería
conversar.
Le dijo: “Cuando me enamorabas, me agarrabas la mano”.
De
mala gana, el marido se dió media vuelta, le agarró la mano por unos segundos y
luego trató de dormirse otra vez.
En pocos momentos ella le dijo
nuevamente: “Entonces me besabas”.
Algo molesto, se dió media vuelta otra vez
y le dió un ligero beso en la mejilla y luego se acomodó para
dormirse.
En treinta segundos, ella le dijo: “Luego tú me mordías el
cuello”. Molesto, el marido tiró la ropa de cama y se levantó.
“A dónde
vas?”, le preguntó ella.