ME ENAMORÉ DE TU SONRISA
Cuando te conocí en aquella primavera
de hace muchos años, te vi bonita y
llena de vida. Pelo oscuro, piel morena
y unos ojos negros con un brillo especial.
Fue tu sonrisa de lo que verdaderamente
me enamoré. Una sonrisa limpia
y tremendamente atractiva. Nunca había
visto una sonrisa igual. Era cálida,
amorosa, serena, dulce, tierna y seductora.
Era elegante, sencilla, franca, mágica,
entusiasta y maravillosa. Era una sonrisa
que afloraba desde dentro, una sonrisa
que hacía dichoso a quien la veía. En aquel
momento sentí el fuerte deseo de poder
mirarla de cerca toda mi vida y poder
mirarme en el espejo de sus ojos. Han pasado
los años y tu sonrisa tiene un brillo
mayor, fruto de madurez y felicidad.
Gracias.
Estoy seguro que existe una relación
directa entre la felicidad de un corazón
que ama y la calidad de su sonrisa.
Sueño muchas, muchas, muchas veces.
Sueño en un más allá con tu sonrisa a
mi lado por toda una eternidad.
A/D
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