Lo lamento muchísimo Maite. Desde las primeras noticias que hablaban de 56 muertos les escribí por este medio sobre mi pesar porque una tragedia como esa, deja de ser , en cierto modo , el dolor de ustedes para convertirse en el dolor de todos. Me sentí reconfortada cuando vi que habías puesto algo en la mimada y ya, desde ayer sabia que Cele estaba bien.
Son muchas las familias destruidas y unidas por el dolor y quedan muchos en los hospitales por quieres orar. Yo desde acá, humildemente, lo hago de corazón porque ustedes para mi, son parte de mi familia y como tal , su tristeza y dolor también son míos.
Solo el tiempo mitigará el dolor causado por esta tragedia pero mientras tanto debemos pedir con mucha fe que la misericordia de Dios les conceda la fortaleza y la resignación para aceptar sus designios que como ahora, son incomprensibles para todos. Un abrazo grande con todo mi cariño y mi solidaridad.