LA NIÑA DE LOS CUENTOS
Érase una vez una niña que le gustaba jugar mucho
con los cuentos.
Cada día buscaba la manera de poder leer uno nuevo.
Cerca de su casa, había una librería dónde cambiaba
los cuentos por unos céntimos.
Ella procuraba junto a sus hermanas y compañeras
de colegio, cambiarlos casi a diario, le fascinaba.
Tanto la gustaba leer, que se metía en los personajes
hasta interpretarlos, a veces hacían teatros entre todas.
Era una soñadora. fue creciendo, escondida en sus fantasías,
era todo tan bonito, y tenía siempre un final tan feliz,
que no quería salir de los cuentos.
Pues cada vez que salía de ellos, veía que no tenía que ver
con la realidad que ella vivía en su entorno.
Era todo tan distinto, tan diferente, que cada vez se
refugiaba más en sus libros.
La transportaban a un mundo mágico, maravilloso, lleno
de aventuras nuevas y de Amor.
Hasta que un día se metió dentro de uno de sus cuentos
favoritos y quedó atrapada durante cuarenta años entre
las páginas del libro, sin poder salir.
Dentro del cuento, ella comenzó a vivir e interpretar
el suyo propio.
Comenzó a escribir páginas y páginas con la historia
de su vida en el corazón del libro.
Un buen día, entre esas páginas, se encontró con un
duendecillo, y le dijo:
"Estás viviendo en el libro equivocado" "¿Quién eres tú?",
le preguntó la niña.
"Soy el personaje real de este cuento, al cual tú no perteneces."
¿Y quién soy yo entonces?" "Tú aquí eres fantasía,
y perteneces al libro de la vida".
Allí eres realidad.", le contestó el duendecillo.
"No conozco ese libro", dijo la niña:
"¡Cómo lo vas a conocer si llevas casi toda tu vida dentro
de los cuentos que han escrito otros!
El libro de la vida eres tú.
"Sal de aquí y comienzas realmente a escribir tu vida
dentro de ese libro que eres tú."