Jesuristo decidió volver a la tierra y además venir vestido
de médico! Buscó un lugar para descender y escogió Venezuela,
en un puesto de salud en el Periférico.
Vio un médico que hacía muchas horas estaba trabajando,
muerto de cansancio.
Jesús entró con la bata, pasando a través de la fila de pacientes
en el corredor, hasta llegar al consultorio médico.
Los pacientes lo vieron y dijeron:
- “Miren! Va a recibir la guardia.
Jesucristo entró en la sala y le dijo al colega que podía marcharse,
pues él continuaría su trabajo. Y todo resuelto gritó:
- “PRÓXIMO!!!”
Entró al consultorio un hombre parapléjico en su silla de ruedas.
Jesucristo se levantó miró al lisiado y con la palma de la mano
derecha sobre su cabeza dijo:
- “LEVÁNTATE Y ANDA!”
El hombre se levantó, caminó y salió del consultorio empujando
su propia silla de ruedas. Cuando llegó al corredor, el próximo
en la fila le preguntó:
- “Oye, cómo es el nuevo doctor?”
El respondió:
- “Igualito a los otros… Ni examina a la gente!
Si hay gente que ya recibió el milagro pero no se toca,
solo vivirá para reclamar o encontrar defectos para todo
en la vida!