¿Qué tal esta yendo el verano? ¿Os está tocando hacer muchos de esos arreglos caseros que se van aplazando hasta tener más tiempo libre? Sí, me refiero a lijar y barnizar sillas, ventanas, arreglar ese grifo que gotea desde hace meses, pintar la casa, arreglar esa tele vieja que tenemos olvidada en una habitación… Pues bien, si es así, este post os encantará… o lo odiaréis tremendamente.
Un manitas es alguien que tiene gran habilidad para hacer las cosas que acabamos de describir anteriormente. Es una persona a quien suelen gustarle los trabajos manuales y quien con más maña (habilidad) que fuerza y muchas veces sin necesitar grandes herramientas es capaz de que cualquier cosa vuelva a funcionar. Seguro que si no lo sois vosotros conocéis a alguien en la familia, un vecino, un amigo, a quien arreglar cosas se le da muy bien y además lo hace con mucho gusto. Pues bien, a esa persona se le dice que es un manitas.
Siempre está bien tener a un manitas cerca porque, antes o después, se termina siempre rompiendo algo y si conocemos a alguien que lo es, el coste de la reparación será simplemente una tarta, una cerveza o como mucho una cena (dependiendo de la magnitud de la reparación). Además, normalmente, los manitas son muy cuidadosos con lo que hacen y no suelen hacer ningún desastre como los fontaneros poco profesionales que te rayan en suelo con sus herramientas o los mecánicos que te dejan una huella de grasa en el techo del coche o los pintores que te golpean el techo con su escalera. No, al contrario que esa gente, los manitas suelen ser, además de hábiles, más respetuosos y cuidadosos con lo que les rodea (a los otros se les llama chapuzas, pero esa es otra historia que dejaremos para otro día).
Bueno, pues hoy no creo que haga falta ejemplo alguno ya que hemos ido introduciendo la expresión española de hoy a lo largo de toda la explicación, pero una buena imagen no puede faltar. Así que os dejo con la imagen de uno de los templos de Angkor Vat en Camboya ya que quien esculpió esas figuras en la piedra tenía que ser todo un manitas.