muchas frutas, verduras y granos cultivados hoy en día llevan menos proteínas,
calcio, fósforo, hierro, riboflavina y vitamina C que los cultivados hace décadas.
Este es un tema especialmente relevante, porque más personas están adoptando
dietas basadas principalmente en plantas, algo que los especialistas recomiendan
cada vez más en favor de la salud pública y la protección del planeta.
La disminución de nutrientes “aportará a nuestros cuerpos menos componentes de los
que necesitan para producir defensas contra las enfermedades crónicas, va a socavar
el valor de los alimentos como medicina preventiva”, advierte David R. Montgomery,
profesor de geomorfología de la Universidad de Washington, en Seattle, Estados Unidos,
y coautor junto con Anne Biklé de What Your Food Ate (Lo que comió tu comida, en español).
Incluso para las personas que evitan los alimentos procesados y priorizan los productos frescos,
esta tendencia significa que “lo que comían nuestros abuelos era más saludable que
lo que estamos comiendo hoy”, afirma Kristie Ebi, experta en cambio
climático y salud de la Universidad de Washington.