La práctica contemplativa se refiere a un tipo específico de observación en el
que existe una devoción total por revelar, aclarar y manifestar la naturaleza de la realidad.
La contemplación también se refiere a un estilo reflexivo de cognición que
puede permitirnos emprender acciones significativas, sirviéndonos a nosotros mismos
y a los demás en la sociedad.
En los últimos años, numerosos estudios han demostrado que las técnicas de
meditación de atención plena se asocian con la reducción del estrés, el fortalecimiento
de la función inmunológica, la moderación de la depresión y la ansiedad, y la
disminución de los informes de dolor crónico en los pacientes.
Teniendo en cuenta los evidentes beneficios psicológicos y fisiológicos de las
técnicas meditativas para aliviar la ansiedad, el estrés y la depresión,
parece bastante claro que los enfoques orientales y occidentales se han integrado con éxito.