Los padres pueden sensibilizar al niño por las cuestiones medioambientales respecto a la
contaminación de su entorno más cercano: el ruido, los humos, los olores, la suciedad de las
calles y del agua, etc. Se les puede proporcionar experiencias a través de las cuales comprenda
la transformación de la naturaleza por la influencia de los cambios del clima y los
fenómenos naturales como la lluvia, la nieve o la sequía.
Otro punto importante es motivarlos para participar activamente en el cuidado, la mejora y
la protección del medio ambiente. Esta motivación le ayuda a adquirir habilidades y
recursos para intervenir en la resolución de algunos problemas ambientales. La idea
es familiarizar al niño con las cosas naturales que configuran su entorno: plantas,
aves, insectos, árboles, flores. Se le debe ayudar a que tome conciencia del parque
como un lugar agradable para disfrutar y donde conviven plantas, animales,
árboles, etc.
Valorando las profesiones y las tareas de las personas que se encargan de manera directa
del cuidado de la ciudad: basureros, barrenderos, jardineros, y reflexionando sobre lo
que sucedería si esas profesiones no existieran. Que conozca las plantas:
Sus partes externas, los cuidados que necesitan, los beneficios que nos proporcionan, las
clases y nombres, etc. Que descubra por sí mismo cómo nacen y crecen, que necesitan
respirar y alimentarse para crecer como las personas, etc. Una actividad conjunta
a realizar podría ser la de sembrar juntos semillas y cuidar el crecimiento de la planta
con mimo, comprobando la necesidad de la luz del sol y el agua para que crezca.
Inculcarles el conocimiento de las flores y sus clases como parte de las plantas, apreciando su
belleza, aroma y colorido. Por otro lado también acercarles al mundo animal (aves, perros, gatos,
hormigas, caracoles, etc.), que conozca y comprenda su forma de vida y sus necesidades,
aprendiendo a cuidarlos, quererlos y respetarlos. Llevarles al museo de ciencias
naturales. Al llegar a casa, compartir las impresiones y realizar dibujos sobre lo que más
le gustó o impresionó.
Revisar la programación de televisión y motivar al niño para ver juntos los programas que guardan
relación con la Naturaleza y los fenómenos naturales (animales, plantas, volcanes, huracanes, etc.).
Siempre que se pueda, hacer excursiones al monte, la playa, la montaña. Disfrutando juntos de todos
los elementos de la Naturaleza, enseñándole a cuidarlos y respetarlos.
La idea es fomentar el cariño hacia las plantas y animales.