Nunca antes hemos tenido tantas opciones y tanta libertad como ahora. Sin embargo, en lugar de poder hacer más cosas que nos satisfagan y nos realicen, nos sentimos asfixiados y sin tiempo para nada. ¿Conciliar es posible? Respuestas.

Día a día aparecen nuevas necesidades, objetivos y opciones que implican ajustes continuos. "Hemos pasado de una sociedad colectivista, con patrones definidos, a una individualista", explica Luis Muiño, psicoterapeuta. La sociedad individualista surge cuando tomamos conciencia del mundo personal: "Antes, un panadero trabajaba de sol  a sol sin sentirse culpable de quitarle tiempo a su familia", señala.

  Dividirnos entre vida personal, laboral y familiar no es sencillo. Para las madres, la situación se complica más: a sus responsabilidades como madre, su promoción laboral se dificulta en muchas empresas; las tareas domésticas, además, no se comparten con la pareja en la mayoría de los casos. Según la Encuesta Periódica sobre Mujer, Mercado de Trabajo y Conciliación de la Vida Laboral y Familiar, realizada recientemente por el Ayuntamiento de Madrid, el 49 por ciento de mujeres con responsabilidades familiares percibe dificultad para  conciliar vida familiar y laboral. Además, solo el 22,7 por ciento de las parejas encuestadas  las responsabilidades laborales y domésticas están repartidas entre hombres y mujeres.

  Entonces... ¿es posible conciliar? Para el psicólogo siempre hay opción para lograrlo: "Conciliar es, sobre todo, una cuestión de mentalidad que, para ser efectiva, debe estar adaptada a nuestra realidad (pasamos temporadas en las que estamos más volcados en el trabajo que en la familia, por ejemplo, y hay que asumirlo)". ¿Por dónde empezar?

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