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"Símbolos divinos que se han dado a la humanidad de vez en cuando hablan a ese foro de la verdad que está dentro de nuestro corazón, y despiertan nuestra conciencia a las ideas divinas por completo más allá de las palabras. Por lo tanto, el simbolismo, que ha jugado un papel tan importante en nuestra la evolución pasada, sigue siendo una necesidad primordial en nuestro desarrollo espiritual;. de ahí la conveniencia de estudiar con nuestra inteligencia y nuestro corazón ''

Max Heindel



Estrella de cinco puntas

El emblema de la Rosa Cruz es uno de esos símbolos divinos. La Escuela de Misterios Occidental (la de la Rosacruz de) tiene como emblema de las rosas rojas (símbolo de la purificación de la naturaleza del deseo) en la cruz (materialidad), la dorada estrella de cinco puntas (que muestran que el Cristo ha nacido dentro del discípulo e irradia a partir de los cinco puntos que representan la cabeza y cuatro extremidades), y el fondo azul (símbolo del Padre). Los colores representan a Dios en la manifestación: la unidad en la Trinidad.

Visto en su plenitud, este maravilloso símbolo contiene la clave para la evolución del hombre pasado, su presente constitución, y su desarrollo futuro, junto con el método de alcanzarlas. En la forma en que se representa con una sola rosa en el centro simboliza la morada del Espíritu Humano que irradia de sí los cuatro vehículos: los cuerpos denso, vital y de deseos, además de la mente.



La Cruz

Pero hubo un tiempo en que esta condición no obtuvo, un momento en que el triple Espíritu flotaba sobre sus vehículos y no pudo entrar. Entonces la cruz se quedó solo, sin una rosa, que simboliza la condición que prevalecía a principios de la tercera parte de la Atlántida. Incluso hubo un momento en que la extremidad superior de la cruz era deficiente y la constitución del hombre estuvo representado por el Tau (T). Eso fue en la época Lemúrica cuando él tenía sólo los cuerpos densos, de vital importancia, y el deseo. A continuación, la naturaleza animal fue primordial hombre siguió el deseo sin reservas.

En un momento aún antes, en la Época Hiperbórea, también era menos el cuerpo de deseos y poseía sólo los cuerpos denso y vital. Entonces el hombre-en-el-toma era como las plantas, casto y sin deseo. En ese momento su estado no podría haber sido representado por una cruz. Se simbolizado por un eje, un pilar (I).

Visualización de nuestro emblema como lo es hoy, observamos que la extremidad inferior de la cruz (que simboliza la materia) indica la planta con sus raíces en la industria química, suelo mineral. Los Espíritus Grupo de plantas están en el centro de la Tierra en la Región del Pensamiento Concreto. A partir de estos Espíritus Grupo fluir corrientes o corrientes en todas las direcciones a la periferia de la Tierra, que pasa hacia fuera a través de la longitud de la planta o árbol.

El miembro superior de la cruz representa al hombre; que es la inversa de la planta. La planta toma su alimento a través de la raíz; hombre toma su alimento a través de la cabeza. La planta está sostenido por la corriente espiritual de los Espíritus Grupo en el centro de la Tierra, que entran en ella por medio de la raíz. La mayor influencia espiritual para el hombre viene del Sol, que envía sus rayos a través del hombre desde la cabeza hacia abajo. La planta inhala el venenoso dióxido de carbono exhalado por el hombre y exhala el vivificante oxígeno utilizado por él.

El animal, simbolizado por el madero horizontal de la cruz, es entre la planta y el hombre. Su columna vertebral está en una posición horizontal y jugar a través de él las corrientes de los espíritus de los animales del grupo que rodean la Tierra.

El reino mineral no está representado, ya que no poseen cuerpo vital individual, y por lo tanto no puede ser el vehículo para corrientes pertenecientes a los reinos superiores.



La Rosa Blanca

En el tiempo presente del modo apasionado de la generación de nuevo será reemplazada por un método puro y más eficiente que el actual, y que también está simbolizado en la Rosa Cruz, donde la rosa blanca se coloca en el centro entre los cuatro brazos. La rama larga representa el cuerpo, los dos horizontales, los dos brazos, y el corto del miembro superior, la cabeza. La rosa blanca está en el lugar de la laringe.

Las siete rosas que adornan el emblema y la estrella radiante de cinco puntas detrás, son símbolo de los doce Grandes Jerarquías Creadoras que han ayudado al Espíritu humano en evolución a través de las condiciones anteriores, como mineral, vegetal y animal, cuando estaba desprovisto de conciencia y no puede cuidar de sí mismo en lo más mínimo. De estos doce ejércitos de Grandes Seres, tres clases trabajados y con el hombre de su propia voluntad y sin ninguna obligación lo que sea. Estos son simbolizados por los tres puntos en la estrella sobre el emblema que apuntan hacia arriba. Dos más de las grandes jerarquías están sobre el punto de retirada, y que aparecen en la fotografía en las dos puntas de la estrella que irradia hacia abajo desde el centro.



Siete rosas rojas

Las siete rosas rojas revelan el hecho de que todavía hay siete Grandes Jerarquías Creadoras activos en el desarrollo de los seres sobre la Tierra, y como todas estas diversas clases no son sino partes de un gran todo a los que llamamos Dios, todo el emblema es un símbolo de Dios en manifestación.

El color rojo de las rosas trepadoras, representativa de la evolución verde escalada vida a alturas cada vez mayores, indica las actividades del Espíritu Santo de Dios en la naturaleza. La analogía humana es el misterio de la sangre limpia. La sangre es el vehículo del control del ego del cuerpo físico. El yo controla el cuerpo por medio del calor en la sangre. En el proceso de vivir correctamente las vibraciones de la sangre se levante armoniosa, la sangre limpia del animalismo y se transforma en el tipo de sangre de Cristo. Ese es uno de los procesos de Cristo en nosotros. Una de las evidencias de esta condición es que el cuerpo se convierte en un instrumento más sensible y receptivo del Espíritu. El veneno de la picadura de una serpiente venenosa, puede ser superado y eliminado por el fuego limpia y de alta vibración en la sangre, como se dice en la Biblia.

Las siete rosas rojas pueden también, en cierto sentido pueden correlacionar con las glándulas de secreción interna, íntimamente relacionadas con el desarrollo oculto de la humanidad. Cuatro de ellos están relacionados con la personalidad; la glándula del timo, regido por Venus; el bazo, gobernado por el Sol; y las dos glándulas suprarrenales, gobernado por Júpiter. El cuerpo pituitario, gobernado por Urano, y la glándula pineal, gobernado por Neptuno, son particularmente correlacionadas con el lado espiritual de nuestra naturaleza, y la tiroides, regido por Mercurio, forma el vínculo entre.



Triple Espíritu, Cuerpo, Alma

Como aspirantes espirituales que recibimos del Emblema el alto ideal de hacer que las rosas de nuestra cruz de brotes y flores - que es, a desarrollarse los poderes latentes del triple Espíritu por las experiencias activos aquí en el mundo material. El triple Espíritu} por medio de la mente, gobierna un triple cuerpo, que emanó de sí mismo para obtener experiencia. Esta triple cuerpo del Espíritu transmuta en un triple alma, sobre la cual se nutre de la impotencia a la omnipotencia.



Discriminación

Ciertas facultades específicas deben ser cultivadas si logro espiritual se va a lograr. Una de ellas es la discriminación, la facultad mediante el cual se distingue la importancia y lo no esencial de la importante y esencial, aprendiendo de esta manera que somos espíritus, y nuestros cuerpos no son más que lugares de residencia temporales, instrumentos para su uso. La discriminación genera el alma intelectual y da al hombre su primera apertura hacia la vida superior.



Observación

Observación es otra facultad importante: el uso de los sentidos para obtener información con respecto a los fenómenos que nos rodean. La observación y la acción correcta en relación a los impactos externos generan el alma consciente.



La devoción a altos ideales

La devoción a los altos ideales es: también es necesario, ya que actúa como un freno a los instintos animales y evoluciona el alma emocional.

Siguiendo el camino de volverse a cerrar a nosotros por el emblema de desplegamos los poderes de Dios mismo - llegamos a ser capaces de hacer las cosas indicadas por Cristo Jesús cuando dijo: "El que cree en mí, las obras que yo hago, él las hará también ; y aun mayores que éstas hará ". (Juan 14:12) Entre los poderes que poseía, como sabemos por sus obras, fueron clarividencia, clariaudiencia, la profecía, la enseñanza, la sanidad, echar fuera demonios, y el control de los elementos. Todos estos poderes pueden ser la nuestra, también, ya que vivimos a fin de hacer las rosas florecen en nuestra cruz.

El alfa y el omega de nuestra aspiración espiritual en el camino del logro se puede decir que ser simbolizada por la rosa blanca utilizada en el Servicio de curación. Representa el corazón del Auxiliar Invisible, purificado, inofensivo, y libre de todos los deseos personales. En nuestra lucha diaria para conformar nuestra vida con el Plan Divino estamos construyendo el cuerpo del alma, el cuerpo de luz en la que podamos funcionar como Auxiliares Invisibles.



La meditación en Emblema

Meditemos a menudo en la Rosacruz del emblema, elevando nuestra conciencia en la contemplación de los altos ideales sostenidos ante nosotros en este símbolo místico. Entonces será establecido el foro de la verdad dentro de nosotros y de día en día desarrollar una conciencia de la grandeza del plan de Dios y de su amor por nosotros.

Yo soy la puerta: el que por mí entrare, será salvo; y entrará y saldrá y encontrará pasto y - Juan 10: 9


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The Rosicrucian Emblem


Divine Symbolism

"Divine symbols which have been given to mankind from time to time speak to that forum of truth which is within our hearts, and awaken our consciousness to divine ideas entirely beyond words. Therefore, symbolism, which has played an all-important part in our past evolution, is still a prime necessity in our spiritual development; hence the advisability of studying it with our intellects and our hearts.''

Max Heindel



Five Pointed Star

The Emblem of the Rose Cross is one of these divine symbols. The Western Mystery School (that of the Rosicrucian's) has as its Emblem the red roses (symbolic of the purification of the desire nature) on the cross (materiality), the golden five-pointed star (showing that the Christ is born within the disciple and radiates from the five points which represent the head and four limbs), and the blue background (symbolic of the Father). The colors represent God in manifestation: unity in trinity.

Viewed in its fullness, this wonderful symbol contains the key to man's past evolution, his present constitution, and his future development, together with the method of attainment. In the form where it is represented with a single rose in the center it symbolizes the indwelling Human Spirit radiating from itself the four vehicles: the dense, vital, and desire bodies, plus the mind.



The Cross

But there was a time when that condition did not obtain, a time when the threefold Spirit hovered above its vehicles and was unable to enter. Then the cross stood alone without a rose, symbolizing the condition which prevailed in the early third of Atlantis. There was even a time when the upper limb of the cross was lacking and man's constitution was represented by the Tau (T). That was in the Lemurian Epoch when he had only the dense, vital, and desire bodies. Then the animal nature was paramount Man followed desire without reserve.

At a still earlier time, in the Hyperborean Epoch, he was also minus the desire body and possessed only the dense and vital bodies. Then man-in-the-making was like the plants, chaste and devoid of desire. At that time his condition could not have been represented by a cross. It was symbolized by a shaft, a pillar (I).

Viewing our Emblem as it is today, we note that the lower limb of the cross (symbolizing matter) indicates the plant with its root in the chemical, mineral soil. The Group Spirits of plants are at the center of the Earth in the Region of Concrete Thought. From these Group Spirits flow streams or currents in all directions to the periphery of the Earth, passing outward through the length of plant or tree.

The upper limb of the cross represents man; he is the inverted plant. The plant takes its food through the root; man takes his food through the head. The plant is sustained by the spiritual current of the Group Spirits in the center of the Earth, which enter into it by way of the root. The highest spiritual influence to man comes from the Sun, which sends its rays through man from the head downward. The plant inhales the poisonous carbon dioxide exhaled by man and exhales the life-giving oxygen used by him.

The animal, symbolized by the horizontal limb of the cross, is between plant and man. Its spine is in a horizontal position and through it play the currents of the animal Group Spirits which encircle the Earth.

The mineral kingdom is not represented because it possess no individual vital body, and hence cannot be the vehicle for currents belonging to the higher realms.



The White Rose

In time the present passionate mode of generation will again be superseded by a pure and more efficient method than the present, and that also is symbolized in the Rose Cross where the white rose is placed in the center between the four arms. The long limb represents the body, the two horizontals, the two arms, and the short upper limb, the head. The white rose is in place of the larynx.

The seven roses which garnish the Emblem and the five-pointed radiating star behind, are symbolical of the twelve Great Creative Hierarchies which have assisted the evolving human Spirit through the previous conditions, as mineral, plant, and animal, when it was devoid of consciousness and unable to care for itself in the slightest degree. Of these twelve hosts of Great Beings, three classes worked upon and with man of their own free will and without any obligation whatever. These are symbolized by the three points in the star upon the Emblem which point upward. Two more of the Great Hierarchies are upon the point of withdrawal, and they are pictured in the two points of the star which radiates downward from the center.



Seven Red Roses

The seven red roses reveal the fact that there are still seven Great Creative Hierarchies active in the development of the beings upon Earth, and as all of these various classes are but parts of one Great Whole whom we call God, the whole Emblem is a symbol of God in manifestation.

The red color of the climbing roses, representative of the verdant evolving life climbing to greater and greater heights, indicates the activities of the Holy Spirit of God in Nature. The human analogy is the mystery of the cleansed blood. Blood is the vehicle of egoic control of the physical body. The Ego controls the body by means of the heat in the blood. In the process of right living the vibrations of the blood are harmoniously raised, the blood cleansed from animalism and changed into the type of Blood of Christ. That is one of the processes of the Christ in us. One of the evidences of this condition is that the body becomes a more sensitive and responsive instrument of the Spirit. The poison from the bite of a venomous serpent-may be overcome and eliminated by the clean, high-vibrating fire in the blood, as stated in the Bible.

The seven red roses may also in a certain sense be correlated to the ductless glands, intimately connected with the occult development of humanity. Four of these are connected with the personality; the thymus gland, ruled by Venus; the spleen, ruled by the Sun; and the two adrenals, ruled by Jupiter. The pituitary body, ruled by Uranus, and the pineal gland, ruled by Neptune, are particularly correlated with the spiritual side of our nature, and the thyroid, ruled by Mercury, forms the link between.



Threefold Spirit, Body, Soul

As spiritual aspirants we receive from the Emblem the high ideal of causing the roses upon our cross to bud and bloom -- that is, to unfold the latent powers of the threefold Spirit by active experiences here in the material world. The threefold Spirit} by means of the mind, governs a threefold body, which it emanated from itself to gather experience. This threefold body the Spirit transmutes into a threefold soul, upon which it nourishes itself from impotence to omnipotence.



Discrimination

Certain specific faculties must be cultivated if spiritual attainment is to be accomplished. One of these is discrimination, the faculty whereby we distinguish the unimportant and unessential from the important and essential, thus learning that we are Spirits, and our bodies are but temporary dwelling places, instruments for use. Discrimination generates the intellectual soul and gives man his first start toward the higher life.



Observation

Observation is another important faculty: the use of the senses to obtain information regarding the phenomena around us. Observation and right action in Relation to external impacts generate the conscious soul.



Devotion to High Ideals

Devotion to high ideals is: also necessary, for it acts as a curb on the animal instincts and evolves the emotional soul.

By following the Path resealed to us by the Emblem we unfold the powers of God Himself -- we become able to do the things indicated by Christ Jesus when He said: "He that believeth on me, the works that I do shall he do also; and greater works than these shall he do." (John 14:12) Among the powers He possessed, as we know from His works, were clairvoyance, clairaudience, prophecy, teaching, healing, casting out devils, and controlling the elements. All these powers may be ours, too, as we live so as to make the roses bloom upon our cross.

The alpha and omega of our spiritual aspiration on the Path of Attainment may be said to be symbolized by the white rose used in the Healing Service. It stands for the heart of the Invisible Helper, purified, harmless, and free from all personal desires. In our daily struggle to conform our lives to the Divine Plan we are building the soul body, the body of light in which we can function as Invisible Helpers.



Meditation on Emblem

Let us meditate often on the Rosicrucian Emblem, raising our consciousness in contemplation of the high ideals held up before us in this mystic symbol. Then the forum of Truth will become established within us and we will day by day develop an awareness of the greatness of God's plan and His love for us.

I am the door: by me if any man enter in, he shall be saved, and shall go in and out and and find pasture -- John 10:9

 
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