Más allá de los Propios Límites…
Un arquero caminaba por los alrededores de un monasterio hindú, conocido por su dureza en las enseñanzas, cuando vio a los monjes en el jardín bebiendo y divirtiéndose. -Qué cínicos son aquellos que buscan el camino de Dios, -dijo el arquero en voz alta- dicen que la disciplina es importante y se emborrachan a escondidas! ¿Acercándose un Monje le pregunto? -Si tú disparas cien flechas seguidas, ¿qué le pasaría a tu arco? - preguntó el más viejo de los monjes. -Mi arco se quebraría - respondió el arquero. -Si alguien se esfuerza más allá de los propios límites, también quiebra su voluntad
-dijo el monje. -Aquel que no equilibra el trabajo con el descanso pierde el entusiasmo, agota su
energía y no llega demasiado lejos. Paulo Coelho
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