Hay una historia de dos hombres
que llegaron donde su maestro espiritual
para resolver una disputa sobre un pollo.
Cada uno decía que el pollo le pertenecía.
El maestro soltó el pollo
en medio de las propiedades de los dos hombres
para ver a donde iba.
A donde el pollo escogiera ir sería el dueño correcto.
Nosotros también estamos atrapados
en la pelea entre la Luz y la oscuridad
dentro de nosotros.
Las Enseñanzas Esotéricas
nos ayudan a liberarnos del agarre
de la parte baja de nuestra naturaleza
y entonces es tarea de cada uno de nosotros
ir hacia nuestro dueño,
la Luz.
Hoy ve hacia la Luz al rechazar la ira,
el odio y la indiferencia
a la vez que abrazas el amor,
el entendimiento y la pasión.
Si cada uno de nosotros puede hacer esto
–y ayudar a otros a hacer lo mismo–
entonces vamos a ser capaces
de hacer una diferencia tangible
en este mundo.
Yehuda Berg
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