Para alcanzar la sobrevivencia, el ser humano, debe cumplir con la tarea de alcanzar la perfección. Pero el hombre, aun ahora, puede saborear por adelantado esta providencia, en sus significados eternos, cuando discurre en el hecho universal de que todas las cosas, ya sean buenas o malas, cooperan para el avance de los mortales que conocen a Dios, en su búsqueda del Padre de todo.
Libro de Urantia. Pág. 1306
Cúan diferente podría ser nuestra vida, si tuviésemos en cuenta, que "todas las cosas, las buenas y las malas, cooperan para el avance espiritual de los que conocen a Dios."1306
"El bien y el mal, no son sino palabras que simbolizan niveles relativos de la comprensión humana. Si eres éticamente holgazán y socialmente indiferente, puedes tomar como tu norma del bien, las costumbres sociales corrientes. Si eres espiritualmente indolente y sin anhelos espirituales, puedes contentarte como norma del bien, las prácticas y tradiciones religiosas de tus contemporáneos."1457
"Pero el alma que sobrevive más allá del tiempo y que emerge en la eternidad, debe hacer una elección viviente y personal entre el bien y el mal, como están definidos, por los verdaderos valores establecidos por el espíritu divino, que el Padre ha enviado a residir dentro del corazón del hombre" 1457
Por tanto, no es lo que nos sucede o lo que hacemos lo que tiene un real valor experiencial, sino lo que volitivamente cada uno haga, siguiendo la guia de su Espíritu. El saber sacarle el significado a todo lo que nos ocurre, es lo que nos da las herramientas para evolucionar, pues tanto el bien como el mal, son energías que nuestra mente puede manipular y vivenciar para su propia experiencia espiritual.
"El alma en evolución, no se vuelve divina por lo que hace, sino por lo que trata de hacer" 557 porque Dios ve las intenciones íntimas y secretas que motivan los actos del ser humano.
yolanda silva solano