Todo depende del cristal con que se mira.

Yolanda Silva Solano.

 

Esta frase tan conocida encierra una gran verdad, porque las mismas circunstancias pueden ser interpretadas en forma muy diferente según sean las emociones que producen, más que por lo que ellas en si mismo son. De allí que “el bien y el mal sólo sean palabras que simbolizan niveles relativos de comprensión humana del universo observable.”1457

Como dice la canción nada es verdad ni es mentira, porque “en el estado mortal, nada puede ser probado en forma absoluta, tanto la ciencia como la religión se basan en suposiciones”1139 esta relatividad de la vida muchas veces asusta, preferiríamos que las cosas fuesen más definidas, pero no lo son y deberíamos alegrarnos, porque en medio de esta relatividad tenemos la posibilidad de hacer nuestros cambios a voluntad en muchas cosas que nos atañen en forma directa.

Es nuestra mente y nuestras intenciones quienes catalogan las circunstancias que nos rodean.  Si estamos situados en la onda positiva, nuestros lentes virtuales nos van a ayudar a ver las cosas buenas aún en las peores circunstancias, pues sabemos que en este mundo todo es relativo y que lo más importante es el significado que le demos a lo que nos ocurre, porque “el poder de toda idea, yace no en su certidumbre o verdad, sino más bien en la intensidad de su atracción para el ser humano”1005

De la misma forma, si estamos negativos, enojados, llenos de rencor e intolerancia, vamos a ser incapaces de aprovechar los buenos momentos que la vida nos puede regalar, porque el cristal de nuestros lentes va a mostrarnos todo borroso.  Si un vaso está sucio, por limpia que sea el agua que en él vaciemos se va a convertir en algo turbio.

“Son nuestros pensamientos los que nos conducen a Dios. Se puede percibir la naturaleza divina, tan sólo con los ojos de la mente”1105  La mirada que se ha sensibilizado con el bien y la belleza, va a saber encontrarla donde nadie la ve, porque la alegría interna de la cual gozan los hijos de Dios, va a guiar sus pasos y van a ver la bondad en cualquier gesto, lo cual se convertirá en una mayor comprensión hacia los demás porque sin duda que “conocer a nuestros hermanos, entender sus problemas y aprender a amarlos es la gran experiencia de la vida”1431

En este momento se están publicitando unos lentes que hacen ver todo mucho más claro, que resaltan los colores y otros que sirven para que de noche las luces no nos encandilen.  Todos deberíamos de tener unos lentes similares, que nos permitieran ver cualquier panorama más claro y más positivo, para que reconociéramos en lo que nos sucede la ley de Causa y Efecto y fuésemos capaces de asumirla y tener la fuerza espiritual suficiente para transmutar lo negativo en positivo, empleando nuestra fuerza de voluntad y nuestro auto dominio, porque nada ni nadie nos puede herir verdaderamente si nosotros no lo permitimos.

El gran error es culpar a los demás de lo que nos ocurre, en vez de ver como están los cristales de los lentes que estamos usando y en el estado anímico que en nosotros prevalece, porque “lo que una imaginación humana esclarecida y reflexiva que ha recibido y aprovechado la enseñanza y que cuenta con la guía espiritual, quiere sinceramente y en forma altruista ser y hacer, se torna medible según sea el grado de dedicación que se ponga en la ejecución de la voluntad divina, porque cuando el hombre se asocia con Dios, pueden ocurrir y de hecho ocurren realmente cosas grandiosas.”1467

Solamente necesitamos que nuestra fe y confianza en el amor de nuestro Padre vaya en aumento con el correr de los días, porque “la espiritualidad eleva la habilidad de descubrir la belleza en las cosas, reconocer la verdad en los significados y la bondad en los valores”1096 porque la espiritualidad no puede estar atada a días, ni a horas de oraciones predeterminadas porque ella es “una forma de vida y una técnica de pensamiento”1013

También deberíamos tener de esos lentes modernos que impiden que las luces nos encandilen, porque muchas veces nos dejamos deslumbrar por lo que otros dicen y nos podemos llenar de un misticismo exagerado o por el contrario nos podemos llenar de temores ante los anuncios catastróficos que tan a menudo se anuncian.

Si bien es cierto que Jesús nos enseño que debíamos buscar la verdad donde quiera que ella estuviese, sin importar que el canal de su transmisión fuese aparentemente humano, debemos cuidar que nuestra visión de la verdad no sea distorsionada por la opinión ajena, porque la verdad al igual que la religión debe ser un asunto completamente personal, porque nadie puede usar los mismos lentes con la cual nosotros la vemos.

 El conocimiento no es la verdad, porque ella es algo vivo sólo cuando somos capaces de encontrarle nuestro propio significado, porque “la religión de revelación deberá siempre limitarse a la capacidad del hombre para recibirla”1007 porque sólo cuando algo se comprende con el espíritu, es posible llevarlo a la práctica e incorporarlo a nuestro Ser con esfuerzo y constancia, pues la enseñanza se debe recibir “para luego ponerla en práctica con nuestros hermanos”1658 si no logramos hacerlo, ella no es más que letra muerta, incapaz de entregar los frutos del espíritu.

No nos dejemos deslumbrar por nada ni por nadie, más bien tratemos de unirnos al Espíritu divino que en nosotros mora, para que sea él quien nos guíe a nuestras propias experiencias, no importa que ellas sean aparentemente pequeñas e insignificantes, lo que importa es que sean conscientes, que sepamos lo que nos está ocurriendo y el por qué actuamos de una u otra manera, porque cuando tengamos que cruzar el umbral de esta frágil vida, sólo podremos llevarnos “aquellos recuerdos y experiencias que son parte de tu carrera universal. Mucho de tu vida pasada y sus recuerdos, que no han tenido significado espiritual, perecerá con tu cerebro material”1235

Si en este momento tuviésemos que partir más allá del horizonte humano ¿Qué podríamos llevarnos como nuestra herencia para la eternidad? No se nos piden éxitos ni grandes logros, sólo se nos pide haber tenido momentos conscientes, haber estado despiertos para actual en forma volitiva en vez de ser una simple marioneta movida por los hilos de las circunstancias.

Miremos pues la vida con nuestros propios lentes y procuremos que su cristal no se empañe, para que podamos verla con la claridad que deberíamos tener los hijos de Dios, a quienes “cada día les resulta más fácil hacer lo que es recto” 1740 porque actúan guiados por el amor, no por el temor, pues “la belleza del amor divino, una vez que entra plenamente en el corazón humano, destruye el deseo de pecar y detiene el poder del mal”2018 porque “la rectitud hace sonar las cuerdas armónicas de la verdad y la melodía vibra a través del cosmos hasta el reconocimiento del Infinito” 556

Cada vez que estemos confundidos, que nos cueste perdonar o sintamos que el Camino se nos hace cuesta arriba, recordemos que a nuestro alcance tenemos unos lentes virtuales que se llaman pensamientos y que si los sabemos manejar en la forma adecuada harán que todo se vea más claro. No permitamos que la loca de la casa como San Ignacio llamaba a la imaginación nos ponga anteojeras que oscurezcan nuestro panorama, recordemos que Jesús nos pidió que “no dependiéramos del consentimiento intelectual, la credibilidad ni de la autoridad establecida, porque la felicidad no depende del medio ambiente” 1573 sino de cómo cada cual aproveche lo mucho que la maestra vida nos entrega para nuestra evolución.

 

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