"La unidad de tiempo puede ser un día, un año o un período más prolongado, pero inevitablemente es el criterio por el cual el yo consciente evalúa las circunstancias de la vida, y por el cual el intelecto que concibe mide y evalúa los hechos de la existencia temporal."1295
"La experiencia, la sabiduría y el juicio son los concomitantes de la prolongación de las unidades del tiempo en la experiencia mortal. A medida que la mente humana piensa hacia atrás en el pasado, evalúa la experiencia pasada con el propósito de aplicarla a la situación presente. Cuando una mente va hacia el futuro, intenta evaluar el significado futuro de una acción posible. Habiendo así tomado en cuenta tanto la experiencia como la sabiduría, la voluntad humana despliega una decisión y juicio en el presente y el plan de acción así nacido del pasado y del futuro se vuelve existente.1295
"En la madurez del yo en desarrollo, el pasado y el futuro se unen para iluminar el verdadero significado del presente. A medida que el yo madura, busca la experiencia cada vez más atrás en el pasado, mientras que sus pronósticos de sabiduría intentan penetrar cada vez más profundamente en el futuro desconocido. A medida que el ser que concibe extiende su alcance cada vez más lejos tanto en el pasado como en el futuro, del mismo modo su juicio se vuelve cada vez menos dependiente del presente inmediato. De esta manera la acción de tomar decisiones comienza a escaparse de las cadenas del presente transitorio, empezando a la vez a tomar aspectos de significación pasado y futuro"1295
En general los cambios deben ser paulatinos, pero la Madre Maturaleza no opina lo mismo, tal vez porque los tiempos de ella ni los de Dios no son los nuestros, por eso de repente nos manda un imprevisto que no sólo cambia radicalmente la vida de los chilenos especialmente los de algunas regiones determinadas del país, causando la muerte de más de 700 personas y dejando sin hogar a miles de miles, sino que la inmensa energía desplegada a permitido que el eje sobre el que la masa terrestre se balancee, moviéndose casi 8 centímetros o 3 pulgadas, lo cual en concreto significa que el día se acorta.
Este cambio repentino en nuestras vidas, no es un castigo de Dios, sino una nueva oportunidad para que los chilenos saquemos esa garra y ese empuje que sacamos desgraciadamente sólo en las situaciones límites como las que estamos viviendo, en donde ha comenzado a aflorar la verdadera solidaridad y el amor y que nos ha hecho dejar atrás cualquier otro problema, para situarnos sólo en el presente y esto ya es una gran consecuencia y una buena lección, porque nos hace madurar y preocuparnos de las cosas que realmente importan.
"Madurar significa vivir más intensamente en el presente, escapándose al mismo tiempo de las limitaciones del presente"1295 porque nos hace comprender que el tiempo no termina con nuestra vida aquí en la tierra, sino que es nuestra primera parada en la ascensión a los cielos y esa sensación la hemos tenido miles de chilenos que nos sentimos cerca de la muerte física, en esos interminables tres minutos que duró el desenfreno de la tierra y que muchos tuvieron la doble experiencia de tener que arracar a los cerros para librarse del tsunami y que en medio del miedo nos hizo exclamar "mi mañana está en manos de mi Padre"1436
Este cambio repentino nos ha hecho cambiar, los chilenos ya no somos los mismos, porque cuando se ha estado cerca de la muerte los valores cambian, las virtudes se acrecientan, por eso la tarea que tenemos por delante y para la cual necesitamos la ayuda de todos, no es sólo lo material para salir adelante en lo físico y material, esto es indispensable pero no basta, tambien tenemos la tarea es preservar la unión, el amor que nos estamos entregando para que la armonía vaya envolviendo al dolor, para que las heridas de los que han perdido a sus seres queridos se transformen en cicatrices en vías de sanación, para que el recuerdo de los seres amados perdure sin que les haga daño.
Si Chile ha sido puesto en la palestra mundial es para que todos aprendamos de la experiencia vivida y nos sintamos más unidos, porque en verdad "SOMOS UNO EN TODOS Y TODOS EN EL UNO QUE ES NUESTRO PADRE.
yolanda silva solano