|
De: yosis (Mensaje original) |
Enviado: 11/04/2010 13:59 |
El mundo necesita ver a Jesús vivir nuevamente en la tierra, en la experiencia de los mortales nacidos del espíritu. Los discípulos de Jesús deberían ser más que conquistadores, deberían ser fuentes de inspiración y de un vivir elevado para todos los hombres.
Libro de Urantia. Pág.2084
En vez de estar a la espera de la segunda venida del Maestro o del fin de los tiempos, lo que realmente debería preocuparnos es de dar testimonio de sus enseñanzas con nuestra propia vida, debemos aprender a ayudar y a hacer el bien en forma desinteresada en cualquiera circunstancia y a cualquier hora del día, porque "la religión es tan sólo un humanismo exaltado, hasta que se la haga divina mediante el descubrimiento de la realidad de la presencia de Dios, en la experiencia personal. 2084"
Si se me pidiera decir en pocas palabras cual es la diferencia del Libro de Urantia de los otros libros sagrados, me atrevería a decir que es la repetición incansable de enseñarnos que lo único realmente válido es la experiencia personal motivada por la dirección del espíritu divino que en nosotros mora, porque mientras la Verdad no se experimenta no es más que un conocimiento más, que no llega a producir cambios individuales, ni menos frutos sociales.
Recordemos el diálogo de Jesús con Ganid cuando se habían encontrado por casualidad con un pagano irreflexivo, camino a los lagos, y Ganid se sorprendió de que Jesús no siguiera su práctica usual de entablar con este hombre una conversación que condujera naturalmente a la discusión de asuntos espirituales. Al preguntarle Ganid a su maestro por qué mostraba tan poco interés en este pagano, Jesús respondió:
"Ganid, este hombre no estaba sediento de verdad. No estaba insatisfecho consigo mismo. No estaba presto a pedir ayuda, los ojos de su mente no estaban abiertos para recibir luz para el alma. Ese hombre no estaba maduro para la cosecha de la salvación; hay que darle más tiempo para que las pruebas y dificultades de la vida lo preparen para recibir la sabiduría y un conocimiento superior. O bien, si pudiéramos llevarle a vivir con nosotros, tal vez podríamos mediante nuestra manera de vivir mostrarle al Padre celestial, y tal vez tanto lo atraería nuestra vida de hijos de Dios que se vería obligado a preguntarnos acerca de nuestro Padre. No puedes revelar a Dios a los que no lo buscan, no se puede conducir al regocijo de la salvación a las almas que no quieren ser salvadas. Es necesario que el hombre llegue a anhelar la verdad como resultado de las experiencias de la vida, o que desee conocer a Dios como resultado del contacto con la vida de los que han conocido al Padre divino, antes de que otro ser humano pueda actuar como medio para conducir a ese mortal al Padre celestial. Si conocemos a Dios, nuestra tarea verdadera en la tierra es vivir de modo tal que el Padre pueda revelarse en nuestra vida, y así todas las personas que buscan a Dios verán al Padre y pedirán nuestra ayuda para averiguar más acerca del Dios que de ese modo encuentra expresión en nuestra vida1406".
Nosotros no podemos ir por la vida hablando continuamente de la enseñanza, ni queriendo convertir a medio mundo, pero si podemos y debemos, dar testimonio de ellas en nuestra vida cotidiana, de manera que sin hablar verbalmente, con el lenguage silente del ejemplo, estemos hablando del Reino de Dios, debemos aprender que "muchas almas pueden ser conducidas mejor a amar al Dios invisible si se les enseña primero con el ejemplo, a amar a sus hermanos a quienes sí pueden ver"1727
Amar a nuestros hermanos es tener caridad, pero esa caridad que no se puede limitar a la ayuda monetaria como se suele creer, porque ella no es Dar, sino DARSE a sí mismo. Es saber escuchar, aprender a empatizar, a ponerme en los zapatos del otro para poder comprenderlo sin juzgarlo. Es darle parte de mi tiempo,de mi atención y de mi cariño, reconociendo en la otra persona a un hijo de Dios.
yolanda silva solano
|
|
|
Primer
Anterior
2 a 2 de 2
Siguiente
Último
|
|
De: Mitzi |
Enviado: 12/04/2010 01:19 |
"...ver a Jesús vivir nuevamente en la tierra, en la experiencia de los mortales nacidos del espíritu."
|
|
|
|
|