Aquello en lo que uno piensa, crece.
Aquello en lo que uno piensa, crece.
Esta es una máxima oriental,
y resume perfectamente las mayores
y más fundamentales de todas las leyes de la Mente.
Aquello en lo que uno piensa, crece.
Aquello en lo que uno piensa, crece.
Cualquier cosa a lo que usted de acceso en su mente,
se magnifica en su vida.
El sujeto de su pensamiento puede ser bueno o malo,
la ley funciona y la condición crece.
Cualquier asunto que usted mantenga fuera de su mente,
suele reducirse en su vida,
pues lo que no se usa, se atrofia.
Mientras más piense en su indigestión o su reuma,
más se agravarán esos males.
Mientras más piense que usted está sano,
que está bien, mejor estará su organismo.
Mientras más piense en las carencias, los malos tiempos, etc,
peor andarán sus negocios,
y mientras más piense en la prosperidad,
la abundancia y el éxito,
dará a su vida una proporción mayor de esos bienes.
Mientras más piense en sus cuitas o en las injusticias que ha sufrido,
más pruebas de ese tipo seguirá recibiendo,
y mientras más piense en la buena suerte que ha tenido,
más buena suerte recibirá.
Esta es la ley Mental básica, fundamental, que lo abarca todo.
En realidad, toda enseñanza psicológica
y metafísica no es mucho más que un comentario sobre esta ley.
Aquello en lo que uno piensa, crece. Filipenses 4.8.