Fiebre Mundialera.
yolanda silva solano.
Creo que gracias a la tecnología que nos ha convertido en una aldea globalizada, este Mundial se ha apoderado del planeta con una tremenda vibración de alegría y esperanza de triunfo, a la cual nosotros los que tenemos la conciencia de ser hijos de Dios, no podemos dejar pasar y debemos también, subirnos a este carro de positivismo, sin importar si nos interesa o no el futbol, pues debemos poner en práctica lo que Jesús vino a enseñarnos que "nada espiritual se consigue si no es a través de lo material.1812" y que "la verdad divina no puede ser desechada porque el canal de su transmisión sea aparentemente humano.1733 Jesús enseñó que las realidades eternas eran el resultado (la recompensa) del esfuerzo recto en la tierra. La estadía mortal del hombre en la tierra adquirió nuevo significado como consecuencia del reconocimiento de un destino noble.1735"
Este Mundial es nuestra realidad y como tal, ella también es una energía a la cual podemos unirnos, no para convertirnos en una masa delirante ante el goooool sino como la levadura que eleva la masa y le da una conciencia que trasciende lo mediático, porque "este evangelio del reino es una verdad viva. Yo os he dicho que es como levadura en la masa, como el grano de la semilla de mostaza; ahora os declaro que es como la semilla del ser vivo que, de generación en generación, aunque sigue siendo la misma simiente viva, se desarrolla infaliblemente en nuevas manifestaciones y crece aceptablemente en canales de nueva adaptación a las necesidades y condiciones particulares de cada generación.1931
Como hijos de Dios no debemos estar ajenos a nada de lo que ocurre en nuestro mundo, porque es en el Aquí y Ahora que nos vamos ganando día a día, nuestra sobrevivencia eterna."No hay nada incompatible entre la filiación en el reino espiritual y la ciudadanía del gobierno civil o secular. Es deber del creyente dar al César las cosas que son del César y a Dios, las cosas que son de Dios. No puede haber desavenencia alguna entre esos dos requisitos, siendo uno material y otro espiritual.1920"
Los seres humanos pertenecemos a un cuerpo místico, a un Todo que lo queramos o no, nos mantiene unidos en el universo, porque "todos formamos parte de un plan inmenso y una gigantesca empresa que los Dioses están supervisando.384" y todas nuestras acciones tienen una repercusión en el funcionamiento del Todo, por tanto aprovechemos que, como pocas veces ocurre, las noticias no nos están hablando de la guerra ni de los asesinatos, sino que nos tienen tapizados con los gritos de aliento y de alegría para sus respectivos equipos y a la cual nosotros debemos unirnos en forma volitiva, más que para alentar a nuesto equipo, con un sentimiento de aprovechamiento espiritual para nosotros y para el planeta, porque "el gran universo no es solamente una creación material de grandeza física, sublimidad espiritual y magnitud intelectual, sino que también es un magnífico y sensible organismo viviente. Existe vida real que late a través del mecanismo de la vasta creación del cosmos vibrante y este organismo material y vivo, es penetrado por los circuitos de la inteligencia, así como el cuerpo humano está atravesado por una red de caminos neuronales de sensaciones. Las corrientes de energía que activan eficazmente la creación material, permean este universo físico, así como el cuerpo humano está alimentado y energizado por la distribución circulatoria de los productos de la alimentación, asimilables como energía. El vasto universo no está vacío de esos centros de coordinación de magnífico supercontrol los cuales se pueden compararse con el delicado sistema de control químico del mecanismo humano. Si tan sólo supieráis algo sobre el aspecto físico de un centro de poder, podríamos, por analogía, deciros mucho más sobre el universo físico.1276"pero nuestra mente finita no está preparada para muchas cosas que desconocemos.
Nuestro universo está regido por diferentes leyes, todas ellas son infalibles y nadie puede escapar a ellas, así como la ley de la gravedad que está siempre presente en nuestro planeta y rige toda la actividad de la tierra, también así la ley de la atracción es totalmente infalible y en este momento, ella está ocasionando que obtengas los resultados que ves en tu vida, ya sea que te gusten o no. La ley de la atracción es una fuerza que rige a nuestro planeta y que regula muchos procesos, es similar a la fuerza de gravedad y la electricidad, las ondas sonoras, los rayos UV, los rayos X y las microondas. Es bueno tratar de conocer las realidades materiales, para poder comprender mejor las inevitables leyes espirituales que gobiernan nuestra vida y forjan nuestro destino en la medida que nos hagamos conscientes y cooperemos con ellas.
No podemos, eludir la ley de atracción, pues ella es la que ocasiona todos los resultados que se manifiestan en nuestra vida. Todo en nuestro Universo, es aparentemente sólido, pero en realidad no es así, nada es sólido, todos lo que existe está formado por conjuntos de moléculas, partículas y átomos. Estamos regidos por el electromagnetismo. Del mismo modo que lo sólido es aparente, también lo es el vacío. “El espacio no es solamente un concepto intelectual de la variación en relación entre los objetos del universo. El espacio no está vacío y la única cosa que el hombre conoce y que puede llegar a trascender aun parcialmente es el espacio de la mente.” 1439 Se ha descubierto que lo que llamamos espacio vacío, es una realidad que está repleta de una inmensa energía potencial. La conclusión ordinaria de considerar el espacio como la nada. El lugar donde se sitúa la materia, evidentemente se ha convertido en nuestro espacio. Pero el vacío, tiene más energía que la materia que está en ese vacío.
Y es precisamente nuestra mente, la que rige la ley de atracción, de ella se derivan todos los acontecimientos que nos ocurren, sean ellos buenos o malos, marcando así nuestra ascensión evolutiva o nuestro estancamiento espiritual, que en definitiva es una involución, porque todo lo estático muere. “Los valores no pueden ser jamás estáticos, la realidad significa cambio, crecimiento.1097" La ley de atracción, no es un concepto, ni un término simple, es una ciencia que la física enseña y sigue estudiando. Nos dice que cada átomo de nuestro cuerpo está constantemente respondiendo a los impulsos del medio ambiente y por supuesto de nuestra mente. Nuestras vibraciones y emociones, ya sean positivas o negativas, tienen influencia en nosotros, por tanto debemos aprovechar que ahora que como nunca, nuestro planeta está vibrando en una honda positiva de alegría, para contagiarnos y para hacer que ella sea algo más permanente en nuestra vida y en la de nuestro planeta.
En estos momentos, debemos ser la levadura que cambie el fanatismo de la masa, por la alegría consciente que nosotros podemos emitir si nos unimos a nuestro Espíritu residente. Cada uno de nosotros, es como un imán viviente que atrae en forma inevitable, a las personas y a las circunstancias que se asemejan a las vibraciones que estamos emitiendo, por eso Jesús nos decía que "el hombre que quiere tener amigos,debe mostrarse amistoso.1739" pues "si amas a la gente, la gente se sentira´atraída por ti y no tendrás dificultad alguna en atraerla.1452" porque la ley de la atracción nos dice que todo atrae a su igual y que todo aquello en lo que concentras tu atención es lo que expandes, lo que alimentas, lo que atraes sin cesar una y otra vez
Convenzámonos que nuestro destino en esta tierra “no es un valle de lágrimas, sino la esfera en donde se forja nuestra alma”1675 y que sin importar nuestro origen terreno, podemos dejar de “ser una parte esclavizada del cosmos matemático, sino ser más bien, un hijo liberado y volitivo del Padre universal, el cual ya no luchará por un destino inexorable de la terminación de su existencia temporal, sino que será capaz de obtener el triunfo de la realidad, sobre las sombras parciales de su existencia.” 1117
Aprovechemos pues, esta fiebre mundialera para crecer espiritualmente, recordemos que el primer paso a los mundos de estancia lo tenemos que dar Aquí y Ahora, porque "en los mundos de estancia recordaremos sólo nuestras acciones conscientes.532" Démosle entonces sentido a la alegría que se respira en el ambiente y que se manifiesta en el consumismo desvocado por la compra de televisores, celulares, camisetas y todo lo que tenga que ver con el Mundial. No miremos con desprecio, ni critiquemos estas actitudes, pues están moviendo a nuestra desgastada economía y creando una unidad nacional que es digna de destacar, cuando los políticos hacen todo lo posible por dividir y crear problemas de convivencia.
Es importante corregir uno de los grandes males de este mundo que es, que el ser humano ha puesto una tremenda brecha entre lo espiritual y lo llamado divino. Ha conminado a Dios, a estar en lugares determinados y ha ser visitado en días y horas precisas, olvidando que Dios está en todas partes, pero especialmente en nuestra alma, ya que desde el día de Pentecostés reside en nosotros el Espíritu de la Verdad. Este Espíritu nos fue entregado para que a pesar de nuestra naturaleza humana, pudiéramos acercarnos a Dios y poner nuestra mente a su servicio, para tratar de entender la divinidad, usando no sólo nuestra fe, sino también todos los descubrimientos de la ciencia y nos abriéramos a nuevos conceptos, a nuevas definiciones y a nuevos acontecimientos, porque de esta forma, estaremos renaciendo, al darnos cuenta que nada de lo humano, es ajeno a lo espiritual, porque “los valores humanos pueden ser transformados en experiencia inmortal, de lo material a lo espiritual, de lo humano a lo divino, del tiempo a la eternidad.” 1118
La preocupación por nuestra evolución espiritual, debe estar siempre acompañada por nuestro interés, por todo lo que pasa en el mundo, tanto a nivel científico como humano y cotidiano, porque es la única forma que nuestra religión sea consecuente con el entorno en que vivimos, con el cual tenemos obligaciones y deberes. Sólo en la medida que nuestra mente, espíritu, alma y cuerpo permanezcan unidos en armonía, podremos ser un aporte no sólo para la sociedad, sino también a nivel cósmico. Mientras no nos convenzamos que no estamos solos y que somos parte de un Todo unificado, seguiremos siendo indolentes con nosotros mismos y con el planeta.
Nosotros, los que buscamos la superación espiritual, formamos parte de este destino, porque “La religión, ha de actuar como sal cósmica, que previene la destrucción del sabor cultural de la civilización, por los fermentos del progreso.1087" Seamos la sal cósmica que le ponga sabor a este Mundial para que la alegría y la buena honda existente en este momento perdure. Recordemos que tanto la palabra como las emociones y pensamientos son creadores. Con ellos podemos ayudar a elevar nuestro planeta o a destruirlo, según sea lo que acaricia nuestra mente, porque “el poder de toda idea yace, no en su certidumbre o verdad, sino más bien en la intensidad del ser humano para atraer lo que su mente piensa.” 1008
Basado en las enseñanzas del Libro de Urantia.