… madre de todos los tiempos, recógeme en tus brazos, abrígame;
en el ingente hueco de tu amor, reconóceme y sonríeme,
háblame;
... tirito, siento frío y no cesa el vendaval de la muerte,
no la irrupción de montañas y mares abiertos,
no la oscuridad íntima;
madre, no el miedo, no la angustia;
… a ti clamo como dios caído,
como hombre,
cual lirio o animal que fui;
… son muchos, madre, mis trozos, las cicatrices/alma, las suturas;
de entre todos los destierros y ordalías
llego;
… pido no un sitio tibio en el hogar, no un sol, madre;
sólo aliento, pausar el dolor;
los hijos de Caín crecemos con la guerra.
Orión