Son besos de colores que se asoman al amor, son misteriosos y hermosos! es su espíritu llamando a nuestra alma, tocándonos en concierto, su sinfonía de amor eterno donde todo se vuelve tranquilo, donde todo se convierte en paz.
Son besos que quitan las penas para dar un "enhorabuena" a cada superación.
Son besos de sueño que dejan su memoria en nuestro centro como torbellinos de energía con la plena sabiduría de quien sólo sabe dar.
Son besitos invisibles para el corazón y visibles para hacer sensibles la fuerza de la creación.
Son una fuerza vital para todas las criaturas que tienen esa hermosura que iluminan todo el cielo vibrando con la conciencia y sonriendo al entendimiento que agiganta nuestro ser.
Son besitos expansivos que nos llenan de su luz, a veces con lagrimitas que se vuelven lluviecitas para calmar el dolor, o soplando un fuerte viento que miramos con horror, pero sólo El nos dice que ese beso es para el valor, para el coraje, para tener el ropaje suficiente que nos impida caer cuando en las tormentas viene a cuentas el perdón.
Son esos besos tiernos de un Padre amoroso que entiende que estamos aprendiendo y cumpliendo la honorable misión de hacer con devoción palabritas que le hacen cosquillitas y que llamamos "oración" y que sólo El entiende con su infinita comprensión que quizás aún somos muy niños y por eso nuevamente El viene así de repente y nos da con fuertes besos... su eterna bendición!