«En la experiencia de encontrar al Padre que está en los cielos, descubres que todos los hombres son tus hermanos
Libro de Urantia.
Es absolutamente imposible el pretender acercarnos a Dios, si no reconocemos en él a un Padre y a todos los hombres como nuestros hermanos, sin embargo ésto que parece tan evidente, a través de los siglos ha sido letra muerta, pues los que nos llamamos cristianos, no hemos sido capaces de aceptar esta verdad y hacerla carne de nuestra carne. Ciertos días determinados, los templos de todo el mundo se ven atiborrados de feligreses que cumplen los ritos establecidos, al igual que los urantianos nos podemos jactar del conocimiento que tenemos de nuestro Libro, pero si todos nosotros fuésemos capaces de vivir la enseñanza ¿nuestro entorno y el mundo no tendría que ser diferente? Las guerras, las injusticias sociales, las violaciones, los rencores y todos los errores del mundo, se comenten por la falta de fraternidad. Se adora a un dios lejano y se ignoran a los seres humanos, porque "solo el amor a la hermandad, puede impedir que los fuertes opriman a los débiles.805" Y los fuertes, no necesariamente son los que oprimen a los pobres, sino que esa opresión también puede ser espiritual, cuando nos creemos superiores a los demás, cuando nos sentimos dueños de la verdad y despreciamos a los que no piensan como nosotros.
Practicar la hermandad no significa dar una limosna o tener una atención especial en forma ocasional, es mucho más que eso, es "conocer a nuestros hermanos, entender sus problemas y aprender a amarlos 1431" Jesús nos dió el ejemplo, a él no le bastó encarnarse como uno de nosotros, él se mezclaba con la gente, no hacía diferencia entre los ricos y los pobres, ni entre los creyentes o los incrédulos, tampoco hizo diferencia entre los hombres y las mujeres, lo cual en su época era totalmente inusual, pero él no dudo en hablar con una mujer samaritana en público y en perdonar a una mujer adúltera.
"Antes de las enseñanzas de Jesús que culminaron en Pentecostés, las mujeres prácticamente no tenían posición espiritual alguna en los dogmas de las religiones. Después de Pentecostés, en la hermandad del reino, la mujer se encontró ante Dios en igualdad de condiciones que el hombre. Entre los ciento veinte que recibieron esta visitación especial del espíritu habían muchas de las discípulas, y ellas compartieron estas bendiciones en igual medida con los creyentes varones. El hombre ya no puede presumir monopolizar el ministerio del servicio religioso. El fariseo podrá seguir agradeciendo a Dios el no haber nacido «ni mujer, ni leproso, ni gentil», pero entre los seguidores de Jesús, la mujer ha sido emancipada para siempre de toda discriminación religiosa basada en el sexo. Pentecostés temino con cualquier discriminación religiosa fundada en la distinción racial, las diferencias culturales, las castas sociales, o los prejuicios en cuanto al sexo.2065"
Nadie puede decir que ama a Dios, si hay rencor en su corazón, si hace diferencias entre los que lo rodean, pues " el hombre que conoce a Dios considera a todos los hombres como sus iguales; ellos son sus hermanos. Los que son egoístas, los que ignoran a sus hermanos en la carne, sólo tienen cansancio por recompensa. Los que aman a sus semejantes y los que tienen un corazón limpio verán a Dios. Dios nunca olvida la sinceridad. Él guiará a los de corazón sincero a la verdad. En vuestras vidas destruid el error y venced el mal por el amor de la verdad viviente. En todas vuestras relaciones con los hombres haced bien por mal. El Señor Dios es misericordioso y amante; es indulgente. Amemos a Dios, porque él nos amó primero. Por el amor de Dios y por su misericordia seremos salvados. Los ricos y los pobres son hermanos. Dios es su Padre. El mal que no querras que te hagan, no lo hagas a otros. 1443"
"El plan de la enseñanza es aprender y luego poner en práctica lo aprendido.1658" pero cabe preguntarnos ¿cuánto de lo que sabemos lo ponermos en práctica con nuestros semejantes?' Creo que somos los fariseos del siglo XXI y merecemos meditar en las palabras de Jesús cuando dijo: "Os aseguráis de presentar una apariencia piadosa y santa ante el pueblo, pero vuestra alma interior está llena de mojigatería, codicia, extorsión, y todo tipo de maldad espiritual. ¿Acaso no comprendéis, hombres necios, que el Dios del cielo ve tanto los motivos íntimos del alma, así como vuestras pretensiones exteriores y vuestras manifestaciones de devoción? No creáis que dar limosnas y pagar diezmos os limpia de injusticias y os permite aparecer puros en la presencia del Juez de todos los hombres. ¡Ay de vosotros fariseos que habéis persistido en rechazar la luz de la vida! Sois meticulosos en pagar el diezmo y ostentosos en dar limosna, pero a sabiendas rechazáis la visitación de Dios y negáis la revelación de su amor. Aunque esté bien para vosotros prestar atención a estos deberes menores, no deberíais haber dejado sin hacer esos requisitos más importantes. ¡Ay de los que ignoran la justicia, desdeñan la misericordia y rechazan la verdad! ¡Ay de todos los que desprecian la revelación del Padre mientras buscan los asientos principales en la sinagoga y anhelan el saludo halagador en el mercado!1826"
yolanda silva solano