DIOS ES UNO, el Universo es UNO, el hombre es UNO, y a su vez, el Hombre, el Universo y Dios mismo como creador vuelven a unificarse en aquella Esencia sin nombre, la cual para captar , es incompetente absolutamente, toda postura mental.
Hallar entonces, el camino hacia esa Unidad, es nuestra tarea, y ninguna otra. No puede ser ya ninguna otra.