La perfección es nuestra meta eterna, no nuestro origen.
Libro de Urantia.Pág.846
Mientras nuestro espíritu esté prisionero de nuestro cuerpo mortal, el mal siempre será una posibilidad latente en nuestras vidas y por lo mismo siempre tendremos que estar atentos para saber discernir entre el bien y el mal, porque un poco de espiritualidad, un momento de intenso fervor no nos hace buenos, nio nos libera del mal potencial para siempre, pues "con excepción del universo central, la perfección es un logro progresivo. En la creación central tenemos un modelo original de perfección, pero todos los otros reinos deben alcanzar esa perfección con los métodos establecidos para el progreso de esos particulares mundos o universos.360" y en el nuestro reina el libre albedrío, por tanto la perfección sólo la podemos adquirir mediante el esfuerzo individual de cada ser humano para lograr ser perfecto como lo es el Padre.
"Los Dioses no pueden transformar una criatura de naturaleza animal en un espíritu perfeccionado, por un acto misterioso de magia creadora, o por lo menos no lo hacen. Cuando los Creadores desean producir seres perfectos, lo hacen mediante creación directa y original, pero jamás emprenden la conversión de las criaturas de origen animal y material, en seres de perfección en un solo paso.541 porque ellos están muy conscientes que "el concepto espiritual no puede ser forzado en forma mecánica dentro del molde de la memoria material, de la misma manera que no se pueden exceder las capacidades inherentes, pues una botella de medio litro, no podrá contener jamás un litro.556 por eso, "la religión de revelación deberá siempre limitarse por la capacidad del hombre para recibirla.1007
Por tanto "los mortales de Urantia dificilmente pueden esperar ser perfectos en el sentido infinito, pero es enteramente posible para los seres humanos, que comienzan como lo hacen en este planeta, alcanzar la meta excelsa y divina que el Dios infinito ha puesto para el hombre mortal; y cuando alcancen este destino estarán, en todo lo que corresponde a la autorrealización y alcance de la mente, tan pletóricos en su esfera de perfección divina como Dios mismo lo está en su esfera de infinidad y eternidad.22"
El Camino de la perfección no se improvisa ni tampoco es posible apurar el paso porque no por mucho madrugar amanece más temprano y como dice muy bien el refrán campesino, no hay que apurar el tranco del ganado flaco, por esoporque "jamás en tu ascenso al Paraíso, te ganarás nada intentando impacientemente eludir el designio divino establecido mediante atajos, invenciones personales u otros artificios para facilitar el avance en el camino de la perfección, para la perfección y hacia la perfección eterna.846 Lo único válido es la evolución progresiva a través del esfuerzo de la propia voluntad
Debemos tener paciencia con nosotros mismos, porque la perfección no se consigue con oraciones, sino que requiere de esfuerzo permanente y consciente para ir aprendiendo cada día más a vencer nuestras conductas indebidas y ha hacer la voluntad de nuestro Padre, con la seguridad que en este peregrinar espiritual, no estamos solos, porque nuestro Espíritu residente está siempre dispuesto a guiarnos y a sortear todas las dificultades que se nos van presentando. No nos amilanemos ante la magnitud de la tarea que tenemos, recordemos que Dios conoce nuestras intenciones sinceras y "la experiencia de una vida dinámica, transforma al individuo mediocre, en una persona de poder idealista.1094"
yolanda silva solano