El problema está que muy pocas veces tenemos claro lo que tenemos que realmente queremos hacer y sobre todo para qué. La mayoría de nuestras acciones son hechas en forma automática y por costumbre, los hábitos son el gran motor que mueve nuestro actuar, sin darnos cuenta que es justamente esa monotonía la que nos cansa y nos agota y lo más grave es que nada de lo que hacemos en forma inconsciente, nos sirve para ganar la inmortalidad, porque “el Espíritu residente, recordará y volverá a recontar para ti, sólo aquellos recuerdos y experiencias que son parte de tu carrera universal y que son esenciales para ella. Mucho de tu vida en la tierra y sus recuerdos, que no han tenido significado espiritual, perecerán con tu cerebro material, mucho de la experiencia material desaparecerá como antiguos andamios que habiéndote ayudado en un nivel, ya no tienen propósito en el universo.1235" Si en este mismo momento tuviésemos que volver a la casa del Padre ¿cuál sería nuestro equipaje? ¿Qué momentos de nuestra vida tendrían valor de sobrevivencia eterna?...
Nunca debemos dejar de lado, la importancia que lo material tiene en nuestra evolución espiritual, porque a través de lo material es que nos ganamos la inmortalidad, porque “ el hombre crece desde lo material hacia lo espiritual por la fuerza y el poder de sus propias decisiones”1282 y Jesús al querer ser uno de nosotros, nos quiso mostrar que aún cuando su reino no era de este mundo, el Camino lo teníamos que hacer Aquí y Ahora, porque “ el verdadero arte, es la manipulación efectiva de las cosas materiales de la vida y la religión es la transformación ennoblecedora de los hechos materiales. 2080" cada ser humano debe ser un alquimista y transmutar lo material en oro espiritual, aprovechando la infinidad de oportunidades que la vida nos ofrece.
Hacer lo que tenemos que hacer resueltamente y con el corazón, quiere decir estar conscientes de lo que hacemos, poner en ello nuestra mente crítica y evaluadora, pero también tomar en cuenta a esa intuición que nace de lo profundo de un corazón bien entrenado para el esfuerzo y la constancia. “ En el corazón del hombre debe existir hambre de perfección, para que sea capaz de comprender los caminos de la fe hasta el logro supremo. Si un hombre elige hacer la voluntad de Dios, conocerá el camino de la verdad” 1118 porque nuestro Padre no nos pide éxitos, sino esfuerzos sinceros por ser mejores cada día.
Hacer lo que debemos, es una invitación a dejar de lado los ensueños que no nos llevan a ninguna parte y poner manos a la obra en forma concreta, para que nuestros sueños se puedan convertir en realidad tangible en un plazo determinado. “Los seres humanos se desalientan cuando ven únicamente las transacciones transitorias del tiempo. El presente cuando está divorciado del pasado y del futuro, se torna exasperadamente trivial. Tan sólo un vislumbre del círculo de la eternidad, puede inspirar al hombre a dar lo mejor de sí mismo y llevar lo mejor que hay en él, a su máxima expresión. Cuando el hombre llega de este modo a su mejor potencial, vive de la manera más generosa para el bien de los demás. 1777" y se siente personalmente cada día más pleno y feliz
Sin duda que nuestra mente, motivada por nuestros pensamientos es quien crea, sin embargo a la hora de tomar decisiones, también debemos tomar muy en cuenta a nuestro corazón, para que sea él quien nos diga si lo que deseamos está conforme con la regla de oro, si nuestros deseos no están pasando a llevar los intereses o el bienestar de nuestros hermanos, tanto en plano material como en el espiritual, porque “sólo el amor a la hermandad, puede impedir que los fuertes opriman a los débiles” 805 Ni el éxito, ni la felicidad se pueden comprar con el sudor o las lágrimas de los otros, no sólo por el daño que podemos causar a terceros, sino porque con la misma vara, seremos nosotros medidos y más temprano que tarde, tendremos que pagar el precio de nuestro egoísmo o de nuestra desidia. Recordemos que Jesús nos dijo “ todo lo que hacéis al más humilde de mis hermanos, a mí me lo hacéis.” 1917
Nuestras acciones, sin importar lo que los hombres opinen de ellas, son similares al juego del frontón, la pelota que tiramos siempre vuelve a nosotros como un bumerán, porque “ la justicia natural es una teoría elaborada por el hombre, no es una realidad. En la naturaleza, la justicia es puramente teórica y ficticia porque la naturaleza no ofrece más que una clase de justicia y ella es la conformidad inevitable de los resultados de las causas” 794
Haz lo que tengas que hacer, significa no dilatar inútilmente lo que tenemos que hacer, no dejar para mañana lo que podemos hacer hoy, porque no sólo es una pérdida de tiempo, sino porque nuestras indecisiones retardan nuestra evolución y la de nuestro Espíritu, quien se complace cada vez que usando nuestro libre albedrío tomamos una decisión que creemos correcta, porque “ cada decisión que haces impide o facilita su función, del mismo modo que estas decisiones determinan tu avance en los círculos del logro humano” 1210
Como somos humanos, en más de una ocasión podemos equivocarnos y los resultados pueden ser deficientes y hasta fatales, sin embargo, si esa decisión fue tomada con la mejor de nuestras intenciones y en forma consciente, ese aparente fracaso se transformará de alguna forma en una experiencia valiosa para más adelante, porque “ninguna experiencia valiosa ocurre jamás en vano, ningún significado verdadero o valor real perece jamás” 1200 no debemos olvidar que “ el Dios del cielo ve tanto los motivos íntimos del alma como vuestras preferencias exteriores y vuestras manifestaciones de devoción.” 1826
El fracaso no es tal, cuando se toma como una experiencia que nos puede ayudar mucho en lo sucesivo, si lo sabemos afrontar, porque “ en aceptar el fracaso y adaptarse a la derrota es donde la visión de largo alcance de la religión ejerce su mayor influencia. El fracaso es simplemente un episodio educacional, un experimento cultural en la adquisición de la sabiduría, en la experiencia del hombre que busca a Dios, embarcado en la aventura eterna de la exploración del universo. Para esos hombres, la derrota no es sino un medio nuevo para el alcance de niveles más altos de la realidad universal.” 1780
Nada desgasta más que las dudas y las incertidumbres, porque ellas nos alejan del momento presente y nos fijan en un futuro hipotético en donde imaginamos mil cosas que probablemente jamás pasarán. No esperemos tener certidumbres, porque ellas en este mundo son muy escasas porque todo es relativo. “la auténtica y genuina certidumbre interior, nada tiene que ver con el análisis exterior, ni tampoco resiente la verdad de la crítica honesta.” 1641 esta premisa es válida tanto para lo material como para lo espiritual, pues “el coraje es la confianza en la total honestidad de lo que profesamos creer. Los hombres sinceros no temen el examen crítico de sus convicciones firmes e ideales nobles.” 1741
Haz lo que tienes que hacer, significa también saber dar prioridades a nuestra vida y no distraernos en cosas sin mayor importancia para nuestra evolución, porque si tenemos claro que nuestra prioridad en esta vida es ganarnos la supervivencia, todo lo demás se nos dará por añadidura, porque “ todo hijo terrenal que siga la dirección del espíritu, conocerá finalmente la voluntad de Dios y el que se someta a la voluntad de mi Padre, vivirá para siempre porque Yo he venido a mostraros el Camino” 1642
yolanda silva solano