Inmóvil, mudo, absorto, me concentro
por la inmensa verdad aún deslumbrado,
y es que nada en mi vida habrá igualado
a la enorme sorpresa de este encuentro....
Hoy, tras mucho penar, me hallo en el centro
del círculo de paz que he ambicionado,
tras de siglos de, en torno, haber buscado
la luz radiosa que llevaba adentro....
En el arte, la ciencia, y el olvido
busquéla con pasión y con locura,
y ahora tiemblo pensando que he podido
vagar por la negrura de mi abismo,
en siglos de ansiedad y de amargura,
sin hallarme jamás conmigo mismo.