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De: yosis (Mensaje original) |
Enviado: 09/09/2011 13:07 |
La verdad es relativa y extensible, pero siempre se vive en el Presente.
Libro de Urantia. Pág. 888
Cuanta sabiduría en tan pocas palabras. Si los seres humanos nos convenciéramos que "en el estado mortal, nada puede ser comprobado en forma absoluta, pues tanto la ciencia como la religión se basan en suposiciones.1139" cuántas guerras mal llamadas santas se abrían evitado y cuantas discusiones estériles no tendrían razón de ser. Pero el concepto de que la verdad es relativa, no es fácil de asimilar, porque preferimos creer ciegamente lo que otros nos dicen para no tener que pensar ni cuestionar nada, olvidándonos que "la verdad estática es verdad muerta, y sólo la verdad muerta puede ser contenida en una teoría. La verdad viva es dinámica y tan sólo puede tener una existencia experiencial en la mente humana.1949"
Jesús vino a traernos el Espíritu de la Verdad y "este don divino no es la letra ni la ley de la verdad, tampoco ha de funcionar como una forma o expresión de la verdad. El nuevo maestro es la convicción de la verdad, es la conciencia y certeza de los verdaderos significados de los niveles espirituales reales. Y este nuevo maestro, es el espíritu de la verdad viva y creciente que se expande, se despliega, y se adapta. La verdad divina es una realidad viva discernida por el espíritu. La verdad existe sólo en los altos niveles espirituales de la comprensión de la divinidad y de la conciencia de la comunión con Dios. Puedes conocer la verdad, puedes vivir la verdad; puedes experimentar el crecimiento de la verdad en el alma y disfrutar de la libertad de su esclarecimiento de la mente, pero no puedes aprisionar la verdad en fórmulas, códigos, credos o esquemas intelectuales de conducta humana. Cuando intentas una formulación humana de la verdad divina, ésta muere rápidamente. La verdad estática es verdad muerta, y sólo la verdad muerta puede ser contenida en una teoría. La verdad viva es dinámica y tan sólo puede tener una existencia experiencial en la mente humana 1949"
Está clarísimo, nada que no haya pasado por el tamiz de la experiencia personal, puede ser llamada verdad. Todo lo que conocemos y creemos, sólo son verdades relativas, que irán cambiando, creciendo y adaptándose en la medida que nuestro discernimiento espiritual vaya creciendo, porque "la información y la inteligencia, aunque procedan de altas fuentes, son tan sólo relativamente completos, localmente precisos, y personalmente verdaderos, por tanto todo conocimiento finito y toda comprensión de la criatura son relativos.42"
Uno de los grandes aportes del budismo, es que a diferencia de las religiones tradicionales, "su filosofía consistió en su comprensión de la relatividad de toda verdad. A través del mecanismo de esta hipótesis, los budistas han sido capaces de reconciliar y correlacionar las divergencias dentro de sus propias escrituras religiosas, así como también las diferencias entre las suyas y las de otros. Se enseñaba que la pequeña verdad era para mentes pequeñas y la gran verdad para mentes grandes.1039" ya que la mente del ser humano, al igual que su espíritu van creciendo, en la medida que nos hagamos conscientes de sus facultades y de su accionar en nuestro ser.
"La inteligencia crece a partir de la existencia material iluminada por la presencia de la mente cósmica. La sabiduría comprende la conciencia del conocimiento elevada a nuevos niveles de significados y activada por la presencia de la dote universal del espíritu ayudante de la sabiduría. La verdad es un valor de la realidad espiritual experimentado tan sólo por los seres dotados de espíritu que funcionan a niveles de la conciencia universal y que, después de la comprensión de la verdad, hacen que reine y viva en sus almas su espíritu de activación.1949" y esto es lo que diferencia el saber de la Verdad, el conocimiento no necesariamente motiva a la acción, en cambio la comprensión de la verdad si lo hace.
El asumir que la Verdad es relativa amplía nuestro radio de acción para buscarla y conocerla, porque no nos limitamos a encontrarla sólo en algunos libros sagrados o ideas filosóficas, sino que la buscamos donde quiera que creamos poder encontrarla. " El verdadero hijo del discernimiento universal busca el Espíritu vivo de la Verdad en toda palabra sabia. La persona conocedora de Dios está constantemente elevando la sabiduría a los niveles de la verdad viva de alcance divino; el alma espiritualmente no progresiva, mientras tanto, arrastra hacia abajo a la verdad viva, hasta los niveles muertos de la sabiduría y el dominio del conocimiento exaltado.1949"
Saquémonos nuestras anteojeras espirituales, no tengamos miedo a buscar la verdad donde quiera que se encuentre, a veces un artículo de sicología nos puede ayudar más en nuestra vida cotidiana a cambiar una pauta errónea de nuestra conducta, que mil oraciones dichas con la memoria del lorito que simplemente repite. Tengamos siempre presente, que " la verdad no se puede definir en palabras, sino tan sólo viviéndola. La verdad es siempre más que conocimiento. El conocimiento pertenece a las cosas observadas, pero la verdad trasciende esos niveles puramente materiales porque se asocia con la sabiduría y abarca tales imponderables como la experiencia humana. El hombre tiende a cristalizar la ciencia, a formular la filosofía, y a dogmatizar la verdad, porque tiene pereza mental para ajustarse a la lucha progresiva del vivir, a la vez que también teme terriblemente lo desconocido. El hombre natural es lento para iniciar cambios en sus hábitos de pensamiento y en su técnica de vivir.1459" y esta es una de los grandes impedimentos para que el Reino se establezca en Urantia, pues Jesús nos dijo que para entrar en él debíamos renacer, lo cual significa cambiar completamente Hoy porque no tenemos ninguna certeza de poder hacerlo mañana.
yolanda silva solano
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"No hay más que un pecado: la Ignorancia; y una sola salvación: el Conocimiento
aplicado. Todo sufrimiento, tristeza o dolor, nace de la ignorancia en el obrar, y
la escuela de la vida es necesaria para desenvolver nuestras capacidades
latentes, así como la escuela es necesaria para despertar en el niño sus facultades.
Cuando nos convenzamos de que eso es así, la vida tomará enseguida
un aspecto muy diferente. No importa entonces en qué condiciones nos
encontremos, porque el hecho de saber que NOSOTROS las hemos
hecho así, nos ayudará a soportarlas pacientemente; y, lo mejor de todo,
el glorioso sentimiento de que somos los dueños de nuestro destino y de
que podemos hacer nuestro futuro como queramos, es en sí mismo un gran
poder que tenemos a nuestra disposición para desarrollar lo que nos haga falta."
MAX HEINDEL
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