Cuando la realidad nos golpea con la muerte de gente con un factor común, expresado en la paz, la alegría y el espíritu de servivio, que brindaban con gran generosidad a quien se cruzara en sus respectvos caminos. Como tantas otras veces, viajaban para hacer el bien, porque amaban a sus hermanos, especialmente a los más necesitados. En medio de la pena, uno no puede dejar de pensar en lo vulnerables que somos y lo incierto que es nuestro futuro, nada ni nadie nos salva de la muerte, cuando nos llega la hora de dejar este mundo... para ir a esas otras mansiones que Jesús nos dijo que el Padre nos tenía preparadas...
Ante la perplejidad que nos deja el accidente de estas 21 bellísimas personas, es bueno detenernos a pensar en la única realidad indiscutible que tenemos y que es, que un día lejano o cercano, tenemos que morir y sin embargo, nos negamos a aceptar esta realidad y vivimos como si fuésemos a vivir eternamente y por lo mismo a la gran mayoría de los seres humanos les aterroriza la muerte y evitan en todo lo posible hablar de ella y les molesta cuando alguién se la recuerda, lo cual es una lástima porque si la sintiéramos más cercana, seríamos capaces de vivir mucho más intensamente nuestra vida. No dejaríamos de hacer, de decir, de demostrar tantas cosas, pensando que lo haremos en un mañana hipotético que no sabemos si lo tendremos, por eso "Cuando los sentimientos del servicio para con vuestros semejantes surjan en vuestra alma, no los ahoguéis; cuando las emociones del amor por vuestro prójimo desborden en vuestro corazón, expresad estos impulsos de afecto, en un ministerio inteligente de las necesidades auténticas de vuestros semejantes.1745"
El gran consuelo para los familiares y para los que conocíamos a varios de los accidentados, es saber que ellos seguirán viviendo en nuestro recuerdo, porque con su estilo de vida, sembraron en nosotros alegría, compromiso social. solidaridad, por tanto no cabe duda que están gozando de los frutos de las semillas que esparcieron en esta tierra, porque Jesús nos dijo que todo lo que hiciéramos al mas pequeño de nuestros hermanos a El se lo hacíamos, por tanto no me cabe duda que hoy todos ellos están junto a El.
Este duro episodio que tanto ha comovido a nuestro país, debería ayudarnos a tener más presente, que "este mundo es tan sólo un puente; podéis pasar por él, pero no debéis pensar en construir sobre él vuestra morada.1735" Si lo considerarámos, tendríamos menos apegos y más deseos de encontrarle a la vida el resquicio legal para ser felices, en vez de tener a flor de labios la recriminación, la crítica y el descontento. Seríamos capaces de ver el vaso medio vacío, pero no para quejarnos, sino para alegrarnos de que todavía tenemos cosas por descubrir y nuestra capacidad de asombro ante las pequeñas grandes cosas que la Maestra Vida nos regala a cada momento, se acrecentaría. Las personas que han sentido la muerte muy cerca, luego de esa experiencia aman mucho más la vida.
Es una paradoja, pero quien ama verdaderamente la vida no teme a la muerte, porque sabe que "cuando el hombre muere, el espíritu comienza a alzar su largo vuelo en el gran viaje de regreso al hogar.1452 " Creo que el miedo a la muerte, surge de lo que se nos ha enseñado: "polvo eres y en polvo te convertrás" lo cual es una gran falacia, pues es todo lo contrario, ya que es la muerte quien nos abre la puerta a una dimensión diferente y mucho más hermosa, desde el momento que nuestra carrera es siempre ascendente. Hemos vivido al igual que las orugas, encerrados en nuestro cuerpo físico y limitados por una mente finita y es gracias a la muerte, que nos crecen las alas de mariposas, para revoletear más alto de lo que jamás habíamos imaginado.
La muerte, en muchos casos nos parecerá incomprensible, para nuestra mente finita es un misterio su llegada, pero esta incapacidad de saber y de comprender los por qué, no deben atemorizarnos, pues en vez de vivir con miedo a que nos llegue la hora de morir, deberíamos preocuparnos alegremente de tener el equipaje listo para partir, como lo tenían estos 21 compatriotas, pues "el destino de la eternidad está determinado de momento en momento, por los logros del vivir de día en día. Las acciones de hoy son el destino de mañana.557"y la motivación de todos ellos era la reconstrucción del Archipiélago despues del desvastador tsunami.
Es AQUÍ Y AHORA, cuando cada uno debe ganarse el derecho a traspasar el horizonte y alcanzar la inmortalidad, dándole valor divino a lo humano, porque "la muerte es tan sólo el comienzo de una interminable carrera de aventura, una vida sempiterna de anticipación, un viaje eterno de descubrimiento.159"
yolanda silva solano