Si eres un aprendiz voluntarioso, si quieres lograr niveles espirituales y alcanzar las alturas divinas, si sinceramente deseas alcanzar el objetivo eterno, entonces el Espíritu divino te guiará suave y amorosamente por el camino de la filiación y el progreso espiritual.
Libro de Urantia.
La principal condición que Dios nos pide para alcanzar las moradas eternas, es que no dejemos nunca de ser aprendices, porque cuando creemos que ya lo sabemos todo, es porque no hemos comprendido nada, pues "el verdadero conocimiento es una búsqueda eterna, siempre estás aprendiendo, pero jamás puedes llegar al conocimiento de la Verdad absoluta.1120" porque nuestra mente finita y limitada es totalmente incapaz de comprenderla. Ser aprendiz es estar consciente que nadie es superior ni inferior a mí, porque espiritualmente todos somos iguales ante Dios, sin importar lo que sabemos o lo que ignoramos, porque El nos juzga no por nuestros conocimientos, sino por nuestras intenciones. "Para entrar en el reino, el motivo es el que cuenta. Mi padre mira dentro del corazón de los hombres y los juzga por sus deseos íntimos y sus intenciones sinceras.1571" pues "el alma en evolución, no se vuelve divina por lo que haga, sino por lo que trata de hacer.557"
Si realmente nos consideramos aprendices, estaremos bien dispuestos a servir a nuestros hermanos en todos los sentidos, como cuando Jesús quiso lavar los piés a sus apostóles, para enseñarnos el amor y la humildad que debemos tener ante nuestro prójimo, porque en cada uno de nuestros hermanos hay una partícula divina que merece nuestra dedicación, porque todo lo que hacemos al más pequeño, se lo hacemos a Dios.
Ser aprendiz nos abre las puertas del mundo espiritual y también del material, porque nuestra capacidad de asombro está siempre presente para mostrarnos todo lo nuevo que a cada instante la Maestra Vida nos está enseñando en todas y cada una de las experiencias que nos toca vivir, porque nada nos ocurre por casualidad y la sabiduría está en buscar la Causa para sacarle el significado, pero también es nuestra obligación el producir Causas, que sean capaces de producir los Efectos que nuestra mente y nuestra voluntad desean, no podemos olvidar que nuestra mente es eminentemente creadora, tanto de lo bueno como de lo malo, porque "aún cuando la mente no es el asiento de la naturaleza espiritual, es por cierto la compuerta"
El aprendiz busca la verdad donde quiera que ella se encuentre, sin importar que "el canal de trasmición sea aparentemente humano" pero de una manera especial el aprendiz que está motivado por sus deseos sinceros de evolucionar, busca y acepta la guía amorosa del Espíritu residente en su propia alma, porque sabe que en su silencio interior, siempre encontrará la respuesta que busca, que en resumen es simplemente que nuestra voluntad esté en comunión con la Voluntad de nuestro Padre y para que ésto sea más que una frase dicha de memoria, es preciso creer en lo mucho que El nos ama y no como a una más de sus criaturas, sino que nos ama en forma personalizada, El sabe todas las cosas...El sabe como nos sentimos y lo que necesitamos...A nosotros sólo nos queda decirle ¡ Papá. tú sabes que te amo...
yolanda silva solano