Sabemos cómo es Dios viendo a Jesús. Quien me ve a Mi, ve al Padre (Jn 14,9)
A Jesús lo vemos consolando, curando, escuchando, compadeciéndose, dando de comer, devolviendo la alegría y la dignidad a las personas, poniéndose del lado de las gentes empobrecidas, indefensas, marginadas, oprimidas, perdonando siempre e incondicionalmente, enfrentándose a quienes se creen en posesión de la verdad, superiores a los demás, a quienes intentan suplantar y acaparar a Dios.
Para saber cómo es Dios sólo hay que mirar a Jesús.