APEGOS.
El Apego es una actitud que sobrestima las cualidades de un objeto o persona
y después se aferra a ella.
Cuando tenemos apego, proyectamos sobre las personas y los objetos cualidades que no poseen,
o exageramos las que poseen. Buda dijo en el Dharmapala:
El apego surge de concepciones erróneas
Por tanto, reconócelas como su raíz. Evita las conceptualizaciones y el apego no surgirá
La mayoría de nosotros estamos básicamente preocupados por la felicidad en esta vida presente.
Buscamos felicidad para gratificar nuestros sentidos.
Siempre queremos ver personas atractivas u objetos hermosos, oír música que nos guste
o escuchar palabras de elogio, oler perfumes maravillosos,
gustar comida deliciosa y tocar objetos agradables.
La búsqueda de la felicidad de esta forma exclusiva en esta vida trae como consecuencia
el resultado opuesto.
Actuaremos de forma egoísta siempre que tratemos de asegurar los objetos a los que estamos apegados
y librarnos de los que nos producen aversión.
Por ejemplo, ¿por qué criticamos con ira a otras personas?
Apegados a nuestra propia felicidad, arremetemos contra los que pueden destruirla.
En ese momento, no nos importa si herimos sus sentimientos.
Apegados a esta vida, tendemos a exagerar la importancia de ciertas cosas,
pensamos cosas como "tengo que ganar tanto dinero para ser feliz",
y no descansamos hasta que conseguimos esa meta, y si no la conseguimos nos frustramos
y nos sentimos intranquilos.
Sobrestimamos la importancia del dinero y no nos damos cuenta
de todas las cosas buenas de nuestra vida.
Cuando tratamos de dejar de anhelar a una persona u objeto hacia la que sentimos apego,
nos enfrentamos a una difícil disyuntiva:
nuestras emociones dicen: "quiero esto" y nuestro intelecto dice: "¡No, eso te perjudica!".
Esa batalla interna es inútil. En vez de librar esa lucha, podemos tomarnos un respiro,
examinar nuestra vida y concluir que el apego hace que nos sintamos insatisfechos e infelices.
Con esa prueba irrefutable de sus desventajas no querremos vernos envueltos en ello por más tiempo.
Cuando entendemos los inconvenientes del apego,
tomamos la determinación de liberarnos del aferramiento a la felicidad de esta vida
y a todos los sufrimientos que trae consigo.
Desde luego, aún querremos ser felices aquí y ahora,
pero no estaremos obsesionados con obtener todo lo que pensamos que necesitamos y queremos.
Debemos reconocer que podemos experimentar una felicidad mayor
que la que sentimos cuando estamos cerca de objetos maravillosos y personas atractivas,
la Felicidad Suprema, la cual proviene de la transformación de nuestra mente.
El desapego es diferente de ser ascético, indiferente o descuidado.
El desapego es un estado mental equilibrado,
en el cual somos libres y enfocamos nuestra atención hacia lo que es realmente valioso.
Trabajando con el apego.
Es verdad que todos tenemos un auto centrismo innato que inhibe nuestro amor por los otros.
Por lo tanto, como deseamos la felicidad verdadera que sólo una mente en calma puede obtener,
y como esa paz se obtiene únicamente con una actitud compasiva;
¿cómo podemos desarrollar esto?
Obviamente, pensar en lo que es la compasión no nos es suficiente,
debemos hacer un esfuerzo conjunto por desarrollarla;
tenemos que utilizar todos los hechos de nuestra vida diaria para transformar
nuestros pensamientos y comportamientos.
La verdadera compasión no es simplemente una respuesta emocional,
sino un firme compromiso fundado en la razón.
Por lo tanto, la actitud compasiva sincera hacia los otros,
no cambia ni siquiera si éstos se comportan negativamente.
OM MANI PADME HUM NAMASTE
|