No podemos comprender plenamente cómo Dios puede ser primordial, inmutable, todopoderoso y perfecto, puede al mismo tiempo estar rodeado de un universo en mutación constante y aparentemente limitado por la ley, un universo evolutivo de imperfecciones relativas.
Libro de Urantia. Pág.31
Ante los males, desastres naturales e iniquidad humana, a veces algunos se preguntan ¿dónde está Dios? pero se les olvida que "la realidad última del universo no puede comprenderse por las matemáticas, la lógica o la filosofía, sólo por la experiencia personal en progresiva conformidad a la voluntad divina de un Dios personal.31" Se puede comprender que "el Padre Primero es infinito en sus planes y eterno en sus propósitos, por tanto es intrínsecamente imposible para cualquier ser finito llegar a aprender o a entender jamás estos planes y propósitos divinos en su plenitud. El hombre mortal puede atisbar los propósitos del Padre sólo de cuando en cuando, aquí y allá, según se revelan en relación con el desenvolvimiento del plan de ascensión de la criatura, en sus niveles sucesivos de progresión en el universo. Aunque el hombre no puede abarcar el significado de la infinidad, el Padre infinito en cambio, con seguridad comprende plenamente y abraza amorosamente toda la finitud de todos sus hijos en todos los universos.35"
Nuestro Padre nos ama con todas nuestras limitaciones, pues "siendo autoexistente, es también autoexplicativo; él efectivamente vive en todo mortal racional. Pero no puedes estar seguro de Dios, a menos que reconozcas que la filiación, es la única experiencia que hace certera la paternidad. El universo experimenta cambios por doquier. Un universo cambiante es un universo dependiente; tal creación no puede ser final ni absoluta. Un universo finito es totalmente dependiente del Último y del Absoluto. El universo y Dios no son idénticos; uno es la causa, el otro es el efecto. La causa es absoluta, infinita, eterna e invariable; el efecto es el espacio-temporal y trascendental pero constantemente cambiante, siempre en crecimiento. Dios es el único hecho autocausado en el universo. Él es el secreto del orden, el plan y el propósito de la entera creación de cosas y seres. El universo en cambio, por todas partes está regulado y estabilizado por leyes absolutamente invariables de los hábitos de un Dios invariable. La realidad de Dios, la ley divina, es invariable; la verdad de Dios, su relación con el universo es una revelación relativa, que es siempre adaptable a un universo en continua evolución.1126"
"Cuando el hombre inspecciona analíticamente el universo a través de las dotes materiales de sus sentidos físicos y la percepción mental asociada, el cosmos parece ser mecánico y hecho de materia-energía. Dicha técnica de estudiar la realidad consiste en volver el universo de adentro hacia afuera. Un concepto filosófico lógico y coherente del universo no puede ser construido sobre los postulados ni del materialismo ni de la espiritualidad, pues ambos sistemas de pensamiento, cuando se los aplica en forma universal, obligan a ver el cosmos en una distorsión, el primero encarando el universo de adentro hacia afuera, el segundo comprendiendo la naturaleza del universo de afuera hacia adentro. Por consiguiente, ni la ciencia ni la religión, podrán jamás por sí mismas, en aislamiento, esperar ganar una comprensión adecuada de las verdades universales y de sus relaciones, sin la guía de la filosofía humana y el esclarecimiento de la revelación divina.1136"
Lo que es realmente importante para nosotros los humanos, es que tengamos plena conciencia que no estamos solos, porque pertenecemos a este Todo indivisible, que constantemente es vigilado con inmenso amor por nuestro Padre y por todas las Personalidades asignadas por El para nuestro cuidado y evolución, pues " El universo de universos es un vasto mecanismo integrado que está bajo el control absoluto de una mente infinita. Los dominios físico, intelectual y espiritual de la creación universal están divinamente correlacionados. Lo perfecto y lo imperfecto están verdaderamente interrelacionados, y por lo tanto la criatura evolucionaria finita, asciende al Paraíso en obediencia al mandato del Padre Universal: «Sed perfectos, así como yo soy perfecto. Los diversos niveles de la creación están todos unificados en los planes y en la administración de los Arquitectos del Universo Maestro. Para la mente circunscrita de los mortales espacio-temporales, el universo puede presentar muchos problemas y situaciones que aparentemente describen desarmonía e indican ausencia de coordinación efectiva; pero aquellos de entre nosotros (lo dice un Mensajero Podreroso) que podemos observar tramos más amplios de los fenómenos universales, y que han tenido más experiencia en este arte de detectar la unidad básica que subyace a la diversidad creadora y de descubrir la singularidad divina que sobrecoge este entero funcionamiento de la pluralidad, perciben mejor el propósito divino y único exhibido en todas estas múltiples manifestaciones de la energía creadora universal.637"
En medio del ajetreo de nuestra vida diaria, deberíamos darnos el tiempo de pensar que somos mucho más que una criatura finita, pues "el impulso de todo electrón, pensamiento o espíritu es una unidad actuante en el universo entero, porque él es un todo, ninguna cosa ni ser existente vive en el aislamiento.647" porque "existe un gran y glorioso propósito en la marcha de los universos a través del espacio. Todas vuestras luchas mortales no son en vano. Todos nosotros somos parte de un plan inmenso, una empresa gigantesca, y es la vastedad de esa empresa la que convierte en imposible, poder ver mucho de ello en un determinado tiempo y durante una vida cualquiera. Todos formamos parte de un proyecto eterno que los Dioses están supervisando y efectuando. Majestuosamente la totalidad del mecanismo universal sigue su marcha a través del espacio al compás de la música del pensamiento infinito y el propósito eterno de la Primera Gran Fuente y Centro.364"
Si tuviésemos encuenta estas verdades, nuestra vida nunca podría parecernos vacía, sin sentido o solitaria. ¿Cómo no poner entonces, toda nuestra energía y todas nuestras vivencias humanas al servicio de este TODO?
yolanda silva solano
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