Las Interacciones entre Individuos por medio del Campo Cardiaco.
La mayoría de la gente piensa en la comunicación social únicamente en términos de señales manifiestas expresadas a través del lenguaje, la voz, gestos, expresiones faciales y movimientos corporales. Sin embargo, ahora existe evidencia de que un sutil pero influyente sistema electromagnético o sistema de comunicación “energético” opera justo debajo de nuestra conciencia. Las interacciones energéticas probablemente contribuyen a la atracción o repulsión “magnética” entre individuos, y que también afecta los intercambios sociales y las relaciones. Es más, parece que el campo del corazón juega un papel importante en comunicar fisiológica y socialmente a los individuos.
Experimentos llevados a cabo en el Instituto HeartMat, han encontrado evidencia remarcable de que el campo electromagnético del corazón puede transmitir información entre la gente. Hemos sido capaces de medir el intercambio de energía cardiaca entre individuos separados hasta por metro y medio de distancia . También hemos encontrado que las ondas cerebrales de una persona pueden, de hecho, sincronizarse con el corazón de otra. Es más, cuando un individuo esta generando un ritmo cardiaco coherente, es más probable que ocurra la sincronización entre las ondas cerebrales de esa persona y los latidos del corazón de otro. Estos descubrimientos tienen implicaciones intrigantes, sugiriendo que aquellos individuos en un estado de coherencia psicofisiológica se vuelven más concientes de la información codificada en aquellos a su alrededor.
El resultado de estos experimentos nos han llevado a deducir que el sistema nervioso actúa como una “antena”, la cual esta orientada y responde hacia los campos electromagnéticos producidos por los corazones de otros individuos. Creemos que esta capacidad de de intercambiar información es una habilidad innata que intensifica la conciencia y mediatiza importantes aspectos de verdadera empatía y sensibilidad hacia otros. Además, hemos observado que esta habilidad de comunicación energética puede ser mejorada intencionalmente, produciendo un nivel mucho más profundo de comunicación no verbal, entendimiento y conexión entre la gente. Incluso existe evidencia intrigante de que las interacciones del corazón pueden ocurrir entre personas y animales.
Para terminar, la comunicación energética a través del corazón facilita el desarrollo de una expansión de nuestra conciencia en relación con nuestro mundo social.
El Campo del Corazón y la Intuición.
Existen también nuevos datos que sugieren que el campo del corazón esta directamente relacionado con la percepción intuitiva, a través de un acoplamiento con un campo energético de información que trasciende los límites del espacio y del tiempo. Utilizando un riguroso diseño experimental, hemos encontrado una fuerte evidencia de que tanto el corazón como el cerebro reciben y responden a información sobre un futuro evento antes de que este suceda.
Incluso más sorprendente fue nuestro hallazgo de que el corazón parece recibir esta información “intuitiva” antes que el cerebro. Esto parece sugerir que el campo del corazón se puede asociar a un campo energético más sutil que contiene información sobre objetos y eventos remotos en el espacio o del futuro. Llamado “domino spectral” por Kart Pribam y otros, esto sería un acomodo fundamental de energía potencial que unifica el espacio y el tiempo, y se piensa que sería la base para nuestra conciencia como un todo.
El Campo Social.
Nuevos datos sugieren que el área del corazón esta directamente relacionada con la percepción intuitiva, y podría recibir esta información antes que el cerebro.
De la misma manera en que el corazón genera energía en el cuerpo, nosotros proponemos que el colectivo social activa y regula la energía dentro del sistema social. Un conjunto reciente de trabajos de vanguardia, muestran que el campo de interacción socio-emocional entre una madre y su hijo es esencial para el desarrollo cerebral, el surgimiento de la conciencia y la formación de una autoestima saludable. Una organización coherente de la relación madre-hijo para darle forma a este campo es esencial. Esto ocurre cuando estas interacciones están cargadas, y esto es importante, con emociones positivas (amor, alegría, felicidad, excitación, aprecio, etc.) y están dentro de los patrones de intercambios recíprocos entre estos dos individuos como algo altamente sincronizado. Estos patrones se imprimen en la mente del niño y tendrán una influencia en su función psico-social a lo largo de su vida.
Por otra parte, en un estudio longitudinal de 46 grupos sociales, uno de nosotros (Bradley); documentó acerca de cómo la organización global de un grupo la conciencia colectiva de grupo parece ser transmitida hacia todos los miembros mediante un campo energético de conexión socio-emocional. Se encontraron datos sobre las relaciones entre cada par de miembros que proveían una imagen muy acertada de la estructura social como un todo. Una organización coherente en la estructura social del grupo esta asociada a una red de emociones positivas que conecta a todos los miembros.
Esta red de emociones positivas parece constituir un campo de conexión energética dentro del cual la información sobre la estructura social del grupo esta codificada y se distribuye a través del mismo. Sorprendentemente, una imagen precisa de la estructura social en su totalidad, se obtuvo solamente a partir de información dada solamente de la relación entre pares de individuos. Creemos que la única manera de que esto fuera posible sea si la información de la organización total del grupo es distribuida a todos sus miembros a través de un campo energético. Tal correspondencia a la información entre algunas partes y del conjunto es consistente con el principio de organización holográfica