Dios encarna en pro de la redención de la humanidad, no para su propio provecho. Él desciende para comunicarle a la humanidad su propio origen divino, y para exhortar a las personas a que retornen a Dios, siguiendo el Principio del Amor.
A través del amor puedes conseguir cualquier cosa. Este es el mensaje que hay que comprender hoy: el rol del Avatar guiando a la humanidad a través del amor, hacia una vida divina. Todo ser humano es una encarnación de la Divinidad.
La Divinidad reside en cada ser. Cada momento señala el advenimiento del Señor, porque continuamente nacen seres humanos. Por lo tanto, dedica cada momento a los pensamientos sobre el Señor. Cuando lo hagas, a su debido tiempo experimentarás a la Divinidad.
Estarás libre de ilusiones y serás divinizado. El ser humano nace para fundirse en la gracia de la Divinidad, no para sumergirse en placeres mundanos. Impregna tu vida de amor, y complétala con amor.
Sathya Sai Baba