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La Verdad, esa que está en todas partes donde el ser humano sea capaz de reconocerla, es como un faro que nos señala el camino y nos ayuda a no encallar en los roqueríos del autoengaño, porque por potente que sea la Verdad que nos alumbre, de poco o nada nos sirve si no la pasamos por el tamiz de nuestra propia experiencia personal. Se supone que el conocimiento de la verdad divina, debiera conducirnos a la virtud pero no siempre es así, pues "ella es rectitud y conformidad con el cosmos. Nombrar las virtudes no quiere decir definirlas, pero vivirlas es conocerlas. La virtud no es sólo conocimiento ni aún sabiduría, sino más bien la realidad de la experiencia progresiva, en el logro de los niveles ascendentes de alcance cósmico. En la vida diaria del hombre mortal, la virtud se realiza como la elección uniforme del bien sobre el mal, y dicha capacidad de elección es prueba de la posesión de una naturaleza moral.193"
La moralidad es un asunto relativo, pues depende mucho del entorno y de las intenciones de la persona, pues "la moralidad de cualquier acción está determinada por la motivación del individuo. Jesús liberó la moral de todas las reglas y ceremonias y la elevó a niveles majestuosos de pensamiento espiritual y vida verdaderamente recta, porque El enseñaba la moralidad, no fundándola en la naturaleza del hombre, sino en la relación del hombre con Dios. 1585" y esta relación "es la actitud de un alma individual, en sus relaciones conscientes con su Creador.1603" por tanto "cada ser humano define la religión en términos de su propia interpretación experiencial, motivada por los impulsos divinos que emanan del Espíritu divino que en él reside y por tanto esta interpretación debe ser única y totalmente distinta de las filosofía religiosa de todos los demás seres humanos.1130" y por lo mismo "la religión no se puede regalar, recibir, aprender ni perder, porque es una experiencia personal, que crece proporcionalmente a la búsqueda creciente de los valores finales. El crecimiento espiritual, por tanto consiste en la acumulación de significados y a la elevación cada vez más amplia de los valores.1095"
La cita nos dice que la experiencia equivale al crecimiento, no especifica la clase de experiencia, pues para acercarnos a Dios, no tiene mayor importancia si nuestras experiencias son buenas o malas, porque de todas ellas si queremos, podemos sacar el significado que nos permita inmortalizarlas como nuestro capital de sobrevivencia eterna, porque "la sabiduría del hombre nace de las pruebas y de los errores de la experiencia humana.58" y "el destino de la eternidad está determinado de momentoa momento por los logros del vivir cada día. Las acciones de hoy, son el destino del mañana.557"
Nuestro camino evolutivo está lleno de faros que nos señalan el camino, un power, una poesía, un artículo de psicología, podrían ser de gran ayuda si les pusiéramos la debida atención, recordemos que Jesús muchas veces hablaba en parábolas para "que cada uno tomara de ella, lo que encontrara acogida en su corazón.1818" Debemos dejar de lado el orgullo urantiano, de buscar la Verdad solamente en las páginas de nuestro Libro, porque al hacerlo nos estamos perdiendo las oportunidades que la Vida constantemente nos está entregando para que de ellas, saquemos las propias experiencias que nos ayudarían a evolucionar en vez de dormirmos en el puro conocimiento, pues " él es una búsqueda eterna; siempre estás aprendiendo, pero jamás puedes llegar al conocimiento pleno de la verdad absoluta. En el conocimiento por sí solo no puede haber jamás una certidumbre absoluta, tan sólo una probabilidad en aumento de aproximación. Aun los descubrimientos de la ciencia no son verdaderamente reales en la conciencia de la experiencia humana, hasta tanto no se desenreden y correlacionen, hasta que sus hechos relevantes se vuelvan efectivamente significativos mediante su inclusión en las corrientes del pensamiento de la mente. El hombre mortal considera aún su medio ambiente físico desde el nivel de la mente, desde la perspectiva de su registro psicológico. Pero, la verdadera religión está viva. La cristalización intelectual de los conceptos religiosos es el equivalente de la muerte espiritual. No podéis concebir la religión sin ideas, pero cuando la religión se reduce tan sólo a una idea, ya no es religión; se ha vuelto meramente una especie de filosofía humana.1120"
Según lo dicho ¿estamos creciendo realmente a nivel espirtual. ????
yolanda silva solano
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