La unidad humana y la hermandad de los mortales pueden ser alcanzadas tan sólo por la superdote de la religión del espíritu y a través de ésta.
Libro de Urantia. Pág.1732
Ahora que el mundo se ha convertido en una aldea global gracias a la tecnología de las comunicaciones, esta cita se hace mucho más necesaria y evidente, porque no podemos desconocer lo que ocurre en el planeta y por lo mismo, nuestra visualización y participación en él debe ser mucho más directa y efectiva, porque en verdad no estamos solos. Esta frase se emplea mucho para recordarnos que junto a nosotros hay seres de otras dimensiones, pero si bien esta es una realidad innegable, creo que por el momento debemos centrarnos en lo que nos pasa a los humanos, porque es lo que nos está tocando vivir Aquí y Ahora.
Muchos prefieren ignorar las noticias por encontrarlas negativas, personalmente creo que eso es hacer como la avestruz. Ignorar los problemas no es la solucion, muy por el contrario, porque si bien es cierto que no podemos actuar en forma específica para solucionarlos, si podemos trabajar con nuestra mente en transmutarlos. El mal por muy desastroso que aparentemente se nos presente, nunca va a poder sobrepasar al Bien porque "el Padre Universal no se ha retirado de la administración de los Universos, el no es una deidad inactiva. El alcance divino se extiende alrededor del círculo de la eternidad, todas las cosas están siendo constantemente renovadas. El Padre incesantemente derrama energías de luz y vida. La obra de Dios es tanto material como espiritual y los universos son estables, porque existe una seguridad subyacentes en medio de los embates de la energía y los cataclismos físicos.55
Es cierto que para nuestras mentes finitas y limitadas, estas verdades no son fáciles de asimilar, pero es allí donde debe renacer nuestra fe y confiar en ese plan divino que "involucra a cada criatura de todos los vastos dominios, y este plan consiste en un propósito eterno de oportunidades ilimitadas, progreso sin límite y una vida sin fin, 365 la cual no se nos regala, sino que tenemos que irla ganando cada uno en forma progresiva, en la medida que seamos capaces de comprender lo que nos sucede en forma particular y también en lo que ocurre en Urantia, con todos sus problemas y deficiencias, porque debemos recordar que "con excepción de Universo Central, la perfección es un logro progresivo, 360 pues "la perfección es nuestra meta, no nuestro origen. 846
Cuando nos damos cuenta que somos parte de un Todo indivisible, nos resulta más fácil el asimilar que todos los hombres son nuestros hermanos y que debemos amarlos como tales. Nada de lo que le ocurra a ellos puede dejarnos indiferentes, por eso es tan importante que los que creemos en Jesús y en su evangelio, permanezcamos unidos en pensamiento, más allá de nuestras diferencias de ver las cosas, porque lo que el Maestro nos pide es unidad, no uniformidad porque "aunque los seres humanos difieren de muchas maneras unos de otros, ante Dios y en el mundo espiritual, todos los mortales están en igualdad de condiciones. Ante los ojos de Dios sólo existen dos grupos de mortales: los que desean hacer su voluntad y los que no lo desean. Al contemplar el universo un mundo habitado, del mismo modo discierne dos grandes clases: los que conocen a Dios y los que no lo conocen. La humanidad se puede clasificar con propiedad en muchas clases conforme a diferentes calificaciones desde un punto de vista físico, mental, social, vocacional o moral, pero cuando estas diferentes clases de mortales comparecen ante el tribunal de Dios, lo hacen en igualdad de condiciones. Dios en verdad no tiene favoritos. Aunque no sea posible escapar al reconocimiento de las diversas capacidades y dotes humanas en asuntos intelectuales, sociales y morales, no deberías hacer tales distinciones dentro de la fraternidad espiritual de los hombres cuando se reúnen en la presencia de Dios.1468
Son nuestros pensamientos positivos los que nos deben unir, más allá de cualquier diferencia aparente, recordemos que: "Diez hombres valen muy poco más que uno solo para levantar una gran carga, a menos que la levanten todos juntos y todos al mismo tiempo. Este trabajo de equipo, esta cooperación social, depende del liderazgo. Las civilizaciones culturales del pasado y del presente se han basado en la cooperación inteligente de la ciudadanía con líderes sabios y progresivos; y hasta que el hombre se desarrolle a niveles más altos, la civilización continuará dependiendo de un liderazgo sabio y vigoroso,porque las civilizaciones elevadas nacen de la sagaz correlación de la riqueza material, la grandeza intelectual, el valor moral, la astucia social y la compenetración cósmica. 911
Son nuestros pensamientos e intenciones las que nos pueden transformar en líderes capaces de ser esa sal cósmica que le dé otro sabor al mundo que vivimos.
yolanda silva solano