"La fraternidad constituye un hecho de relación entre todas las personalidades en la existencia universal. Ninguna persona puede evadir los beneficios o las sanciones que puedan sobrevenirle como resultado de una relación con otras personas. La parte se beneficia o sufre en relación con el todo. El buen esfuerzo de cada hombre beneficia a todos los hombres; el error o el mal de cada hombre aumenta las tribulaciones de todos los hombres. Según se mueve la parte, así se mueve el todo. Según es el progreso de la totalidad, así el progreso de la parte. Las velocidades relativas de la parte y el todo determinan si la parte se atrasa por la inercia del todo o si adelanta por el impulso de la fraternidad cósmica."138
“Los hombres no hallan al Supremo en forma repentina y espectacular como un terremoto abre abismos en las rocas, sino que lo encuentra lenta y pacientemente como un río que va desgastando quietamente su lecho. Cuando encuentras al Padre, hallas la gran causa de tu ascensión espiritual en los universos, cuando encuentres al Supremo descubrirás el gran resultado de tu carrera de progresión al Paraíso” 1291.
La forma de encontrar al Supremo es buscarlo en el corazón de todos los hombres, de todos sin excepción, porque “Conocer a nuestros hermanos, entender sus problemas y aprender a amarlos es la suprema experiencia de la vida”1431, por eso en estos momentos de grandes conflictos entre los hombres, debemos ampliar nuestra conciencia para saber amar a pesar de todo a moros y cristianos. Un hijo de Dios, un urantiano, puede tener una opinión, demostrar su inclinación por uno u otro bando, pero jamás podrá sentir que los del bando contrario son sus enemigos ni tratarlos como tales, pues no estaría cumpliendo con las enseñanzas de Jesús porque Él “aborrecía la idea de la venganza, así mismo la de convertirse en un sufriente pasivo o una víctima de la injusticia” 1770.
“Jesús exigía que sus seguidores reaccionarán positiva y enérgicamente en toda situación de la vida. Él no apoyaba una práctica de sumisión negativa a las indignidades de los que pudieran buscar a sabiendas aprovecharse de los que practican la no resistencia contra el mal, sino más bien, que sus seguidores fueran sabios y estuvieran alertas para reaccionar rápida y positivamente con el bien frente al mal, con el objeto de conquistar eficazmente el mal con el bien” 1770.
“Jesús tenía un firme sentido de la justicia, pero era una justicia siempre atemperada por la misericordia. No enseñó a sus apóstoles que se dejaran dominar por los parásitos sociales, ni por los buscadores profesionales de conflictos. Lo más cercano a un comentario sociológico que hizo fue : no juzguéis, para que no seáis juzgados”. Nuestra contribución a la paz debe ser consecuente, no se puede alcanzar la paz haciendo la guerra ni odiando al que no piensa como nosotros. Este es el momento de poner en práctica lo aprendido en forma intelectual. Muchos incitan a la oración para conseguir la paz, pero se olvidan que “La adoración es la técnica de buscar en el Único, la inspiración para servir a muchos”1616. “La verdadera oración de fe siempre contribuye al mejoramiento de la técnica del vivir. Aunque la oración no cambia a Dios, muy frecuentemente efectúa cambios grandes y duraderos en el que ora con fe y confianza. La oración ha sido el antepasado de mucha paz mental, alegría, calma, valor, autodominio y justicia entre los hombres y las mujeres de las razas en evolución” 998.
Trabajemos porque nuestras vidas sean impecables, y con nuestras vibraciones positivas y llenas de amor, ayudemos a que la ansiada fraternidad llegue a Urantia, para que los designios del Padre se hagan realidad a través del cumplimiento de las enseñanzas que su Hijo nos trajo. Oremos no sólo por la paz, sino que también oremos y perdonemos y amemos a todos aquellos que propician la guerra.....
yolanda silva solano