Comienza un nuevo año, se supone que hemos dejado atrás todo lo negativo... todo lo qie nos impedía ser perfectos...como Jesús nos enseñó... y que nuestro deseo sincero es tratar de aprovechar esta nueva oportunidad que el Padre nos concede para evolucionar. Si bien el tiempo es algo relativo, para nosotros los humanos es algo concreto, porque “Los acontecimientos del tiempo y las luchas de la existencia material no son otra cosa que el andamio transitorio que tiende un puente hacia el otro lado, hacia la tierra prometida de la realidad espiritual y la existencia celestial”364, porque “Jesús nos enseñó que las realidades eternas eran el resultado ( la recompensa ) del esfuerzo recto en la tierra. La estadía mortal del hombre en la tierra adquirió nuevo significado como consecuencia del reconocimiento de un destino noble”. 1860
“Este mundo es sólo un puente, podéis pasar por él, pero no debéis pensar en construir sobre él vuestra morada”1735, de allí la importancia de vivir en forma consciente el momento presente porque es en él donde se adquiere la verdadera espiritualidad, porque “ella es una búsqueda eterna, siempre estás aprendiendo, pero jamás puedes llegar al conocimiento pleno de la verdad absoluta”1120. “La verdad es una revelación liberadora, pero el amor es la relación suprema”1608. “El momento de la eternidad está determinado de momento a momento por los logros del vivir día a día. Las acciones de hoy son el destino del mañana.” 555
Es pues un buen momento, para detenernos unos instantes y elaborar una especie de plan a realizar a lo largo de este año que comienza porque “el que sepa gobernarse a sí mismo es más grande que el que conquista una ciudad. El autodominio es la medida de la naturaleza moral del hombre y el indicador de su desarrollo espiritual”1609, “porque los frutos del espíritu de Dios se muestran en vuestra vida rutinaria diaria”. 1733ç
Para evolucionar no precisamos de nada extraordinario, basta el ir teniendo cada día más conciencia de lo que hacemos y para qué, porque muchas de nuestras acciones están motivadas por nuestro ego más que por nuestro espíritu.
Debemos convencernos que ningún conocimiento, por bueno que él sea puede ayudarnos a evolucionar si en nuestro corazón hay temor por el mañana (falta de confianza en la voluntad de Dios) Si somos impacientes con nosotros mismos y con nuestros hermanos, olvidando que "la perfección es nuestra meta, no nuestro origen."836 por tanto ella no se puede conseguir porque algunas veces actuemos bien... ella requiere de un autodominio pemanente a través de nuestra vida cotidiana, porque nadie, absolutamente nadie puede evolucionar por nosotros.
yolanda silva solano