Mi pasado y mi futuro pueden dar significado a mi experiencia en el mundo, mas es sólo en el momento presente cuando puedo co-crear mi vida con Dios.
Dejo atrás “las cosas que no puedo cambiar”, las acepto y aprendo de ellas. Ante mí hay posibilidades e ideas infinitas esperando ser captadas y usadas por mí por medio de la oración, la afirmación y la acción.
En este preciso momento, experimento la plenitud de Dios. Afirmo solamente lo mejor, consciente de que todo el bien que deseo está disponible para mí. Doy gracias a Dios por este momento y por la salud y la paz que disfruto aquí y ahora.