Hay una profunda conexión entre la felicidad y el sufrimiento. Si sabemos cómo utilizar el sufrimiento, podemos crear la felicidad. Para hacer crecer flores de loto necesitamos el barro. No podemos crear flores de loto sin barro. El sufrimiento es como el barro. Sin sufrimiento no es posible es la felicidad. Aquellos que practicamos la plena conciencia y la meditación, hemos de reconocer nuestro sufrimiento.
Miramos profundamente la naturaleza de nuestro sufrimiento. Si sabemos cómo manejar el sufrimiento en nuestro interior, si sabemos cómo sufrir, sufriremos menos que otras personas. El sufrimiento es un arte. Si sabemos utilizar nuestro sufrimiento, podemos crear felicidad para nosotros y para quienes nos rodean. La mayoría de nosotros no sabe sufrir. Tenemos miedo del sufrimiento, temor a adentrarnos en nosotros mismos. Si tenemos el coraje de afrontar nuestro sufrimiento, tendremos la oportunidad de manejarlo. Sabremos cómo traer el alivio, cómo utilizar el sufrimiento para traer la felicidad. |