Hemos crecido creyendo que en Dios hay tres personas distintas,
el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, como se nos ha enseñado como dogma de fe,
simplemente lo hemos aceptado. La Quinta Revelación, nos abre la puerta del
misterio de la Trinidad Divina. No podemos comprenderlo con nuestra mente
finita, porque "el Padre Primero es infinito en sus planes y eterno en sus
propósitos, por tanto es intrínsecamente imposible para cualquier ser finito,
entender jamás estos planes y propósitos divinos en su plenitud."35
Por éso, "el hombre puede atisbar los propósitos del Padre sólo
de cuando en cuando, aquí y allá, según se revelan en relación con el
desenvolvimiento del plan de ascensión de la criatura en sus niveles sucesivos
de progresión en el universo. Aunque el hombre no puede abarcar el significado
total, el Padre infinito comprende al hombre plenamente y lo abraza
amorosamente."12
Nuestra
misión no es el comprender lo incomprensible, sino "crecer cada vez más en la
habilidad de sentir la presencia de Dios. Porque cuando lo encuentres
en tu propia alma, pronto lo encontrarás en el alma de otros hombres y a su
debido tiempo en todas las creaciones del Universo."1733
Por eso, es bueno el conocer más al respecto, porque en la medida
que lo hagamos,vamos a ir aprendiendo a amar mas a estos Dioses, que siendo
iguales, tienen roles diferentes, pero que todos van encaminados hacia la
perfección de la criatura. El Padre a través de su Amor, el Hijo a través de su
misericordia y el Espíritu Santo por medio del servicio
amoroso.
Lo
importante es que ningún mortal está nunca solo en su búsqueda eterna de
encontrar a Dios y llegar algún día a través del espacio infinito a ser
perfectos como El lo es. En la medida que en forma consciente, nos hagamos cargo
de nuestros pensamientos positivos y de nuestros sinceros deseos de evolucionar
Aquí y Ahora, estaremos también nosotros siendo los co-creadores de un mundo
mejor sin guerras.
yolanda silva
solano