… con temblor de rocío, abriéndose y crepitando,
el estruendo del mundo rompe al aire el divino secreto de la rosa:
su dios de brisa y fuego,
su pureza y canto,
su haz de luz,
su estética inmortal;
…uno discurre y pasa cual profunda incógnita tras sus pies y sus manos, tras sus ojos y corazón cansados,
y día a día, instante a instante marcha y va cayendo, agotando la noción de ver, sentir y oír su magnificencia,
su don,
su íntima y sublime ley;
… cuando por tanto brote, emerja y nazca una rosa y todo sea infinitud y pasmo y proclamación,
por una vez, sólo una, piensa en ti y reconócete,
reconócete e instruye un acto extraordinario de invencible y exquisito amor:
- por ti, por ti mismo, amigo o amiga, hazlo por ti:
rebélate, atrévete y engéndrate, sal de tu ingente lobreguez y erige y rige el mundo,
sé, sé tú - y cual rosa - créate, créate real, total y definitivamente.
Orión de Panthoseas