Vive...
Siempre lo digo...
la fidelidad hacia nosotros mismos
es fundamental en este viaje llamado Vida.
El corazón siente un impulso, un instante,
un rumbo, hay que seguirlo.
¡Ve tras tus sueños! ¡Feliz Vida!
Aprovecha el día.
No dejes que termine sin haber alimentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho
de expresarte, que es casi un deber.
No abandones tus ansias de hacer
de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras
y la poesía, sí pueden cambiar el mundo.
Porque pase lo que pase,
nuestra esencia está intacta.
Somos seres humanos llenos de caminos.
La vida es desierto y oasis, nos derriba,
nos lastima, nos enseña, nos convierte
en protagonistas de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa.
Tú puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores, el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes. ¡Huye!
Emite tu alarido sano por los techos de este mundo.
Valora la belleza de las cosas simples,
y también la simpleza de la belleza.
No traiciones tus creencias,
todos necesitamos aceptación,
pero no podemos remar en contra
de nosotros mismos, eso transformaría
la vida en un verdadero infierno.
Disfruta el pánico que provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente sin mediocridades.
Piensa que en ti está el futuro y encara
la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes pueden enseñarte.
No existe nadie tan sabio
que no pueda aprender algo nuevo,
como tampoco hombre tan torpe
que no tenga algo por enseñar.
¡Aprende! Pero sobre todo, aprende a vivir.
¡Enseña! ¡No permitas que la vida te pase
a ti sin que la vivas…!